Salud España , Salamanca, Martes, 02 de diciembre de 2008 a las 16:36

Un experto en salud mental afirma que la depresión será la segunda causa de discapacidad para el año 2020

Antonio Espino, médico psiquiatra, ha inagurado los actos conmemorativos del Día Internacional de las Personas con Discapacidad en la Universidad de Salamanca

JV/DICYT Mañana día 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, y la Universidad de Salamanca ha inaugurado los actos conmemorativos de esta efeméride con una conferencia de Antonio Espino Granado, médico psiquiatra y jefe de los Servicios Mentales del Hospital de Majadahonda. En el evento, celebrado en el aula Francisco Salinas del Edificio Histórico de la Universidad de Salamanca, el especialista ha destacado que "según los últimos estudios perspectivos, la depresión será la segunda causa de discapacidad entre la población mundial, para el año 2020". De esta manera, el doctor Espino ha remarcado que con la "actual estrategia en Salud Mental que se implantará en España, se otorgará mayores derechos a los enfermos mentales y se avanzará en el reconocimiento de ayudas a sus familias".

 

Según Antonio Espino, que fue secretario de la Comisión Ministerial para la Reforma Psiquiátrica, "en los años 80 lo que hacíamos era recuperar la dignidad de la salud mental y prestar una atención general a los enfermos. Ahora se trata de introducir reformas en algunos aspectos que flaquean, como por ejemplo en la entrega de ayudas económicas a los enfermos y a sus familias, que hasta ahora habían sido muy precarias". De esta manera, "la nueva estrategia para la Salud Mental dentro del Sistema Nacional, no viene a ser una revolución, como supuso la reforma de la década de los 80 con el cierre de los hospitales psiquiátricos, sino que intentará mejorar la cohesión entre los distintos centros sanitarios que tratan a pacientes mentales, tanto dentro de su región, como a nivel estatal".

 

Desde la década de los 80

 

Antonio Espino, en declaraciones recogidas por DiCYT, manifestó que "desde la reforma de los años 80 no se ha tratado de mejorar la situación de los enfermos mentales, y el problema ha ido sumando consecuencias de las que la comunidad sanitaria no podía dejar de actuar". Asimismo, uno de los indicadores que mejor reflejan la situación, según afirma Espino, es la "incesante subida de casos de ingresos no voluntarios y de enfermos internados en centros penitenciarios". Para el especialista, el problema ha venido dado por "la poca atención del Estado hacia este tipo de pacientes". "Es verdad que el compromiso presupuestario de los gobiernos con la salud mental está por debajo de las necesidades reales, sobre todo, si observamos los índices de pacientes, y si observamos asuntos tan graves como las muertes prematuras, las inversiones económicas en salud mental han sido siempre precarias", añadió.