Tecnología España , Salamanca, Martes, 06 de abril de 2010 a las 18:50

Reconocimiento internacional a un sistema para invidentes que 'lee' el prospecto de los medicamentos por m贸vil

La Universidad Pontificia de Salamanca, finalista del NFC Forum Global Competition 2010, que se celebrar谩 en M贸naco el 21 de abril

JPA/DICYT Un proyecto de la Universidad Pontificia de Salamanca ha sido seleccionado para participar en el NFC Forum Global Competition 2010, en el que se dan cita los principales desarrolladores de una tecnología puntera en el campo de las comunicaciones, la NFC (Near Field Communication), un sistema similar al bluetooth con un amplio futuro, según los expertos. Aunque la Escuela Universitaria de Informática de la Universidad Pontificia lleva años trabajando en esta línea, en esta ocasión se presentará con un proyecto concreto denominado PharmaFabula, cuyo objetivo es que las personas con deficiencias visuales puedan informarse de los contenidos del prospecto de un medicamento con sólo acercar su teléfono móvil a la caja. Lo harían gracias a un sistema de audio que incluso se puede personalizar con indicaciones específicas para cada paciente. La iniciativa ha llamado tanto la atención que optará al premio internacional frente a potentes proyectos tecnológicos de Alemania, Japón, Reino Unido, Bélgica, Francia y Pakistán. 

 

Esta aplicación concreta se basa en un proyecto anterior más genérico, denominado Fabula, cuyo objetivo era que las personas con problemas de visión identificasen objetos a través del móvil. Esto se hace mediante la creación de etiquetas inteligentes que se pueden adherir a cualquier producto. Entre la información que contienen figura el enlace a una página web de la que se descarga un archivo de audio que ofrece información al usuario. Las etiquetas utilizan la tecnología RFDI, de identificación por radiofrecuencia, mientras que la comunicación del móvil con el objeto se basa en la tecnología NFC, poco conocida hasta el momento, pero similar al bluetooth, puesto que también permite intercambiar datos entre dos dispositivos. Las posibilidades de este sistema son enormes y, en este caso, tienen una aplicación muy específica y valiosa.

 

"Las cajas de medicamentos ya ponen en braille de qué fármaco se trata, pero esto es insuficiente para una persona que quiera informarse sobre la dosis, las contraindicaciones o la posología que tiene, por eso pensamos en este proyecto", ha explicado a DiCYT Miguel Ángel Sánchez Vidales, responsable del Club de Innovación de la Universidad Pontificia de Salamanca, que será el encargado de defender la iniciativa en la competición de Mónaco.

 

Uno de los aspectos más llamativos del proyecto es que permitiría no sólo que los invidentes tengan acceso a la información del prospecto, sino que el médico o el farmacéutico pueda incluir en ella datos personalizados a la hora de realizar la receta o de suministrar el fármaco. Así, la tarjeta RFID con la información se puede adherir a la caja del medicamento sólo con los datos genéricos del prospecto o con estos datos más la información adicional personalizada, por ejemplo, sobre la forma de administrarlo, que puede añadir el propio médico.

 

Todo el proyecto Fabula nació de la mano de los estudiantes Fernando Fernández Fidalgo y José María Pérez Ramos y ha contado con el apoyo de la profesora Montserrat Sánchez y el ingeniero del Centro de Proceso de Datos de la Universidad Pontificia Juan Agustín Fraile Nieto. El éxito no sólo les llega con la participación en esta competición internacional de Mónaco, ya que Fernando Fidalgo fue elegido como uno de los 100 talentos europeos en el Foro de Emprendedores 2009. Por su parte, José María Pérez Ramos ha creado su propia empresa, donde trabaja en el ámbito de las tarjetas inteligentes. Esta aplicación, desarrollada en el marco del Club de Innovación de la Universidad Pontificia de Salamanca y la Fundación Caja Duero, cuenta con el apoyo de la empresa internacional G&D, referente en la fabricación de tarjetas inteligentes, que ha formado a los investigadores.

 

Miguel Ángel Sánchez Vidales asegura que sólo el hecho de haber sido seleccionado el proyecto para su defensa en Mónaco es un reconocimiento importante. "Nos hemos presentado con valentía frente a centros tecnológicos que se dedican al desarrollo de este tipo de tecnología, dejando fuera otros de Finlandia o Suiza muy especializados", asegura. Todo esto se consigue por la apuesta que ha hecho el Club de la Innovación por la tecnología NFC, que en España apenas se conoce y está presente en pocos móviles, pero que en algunos países de Asia se usa para aplicaciones como la realización de pagos.