El informe sobre la calidad del aire en Valladolid en 2008 indica que s贸lo se superaron los valores de ozono
YG/DICYT “Valladolid ha disfrutado durante 2008 de una calidad del aire excelente”, con concentraciones de dióxido de azufre (SO2), monóxido de carbono (CO), dióxido de nitrógeno (NO2) y material particulado por debajo de los límites establecidos. Así se desprende del informe sobre la calidad del aire en la capital durante el año pasado que ha dado hoy a conocer el alcalde, Francisco Javier León de la Riva, en el que se refleja que sólo uno de los contaminantes, el ozono, superó el valor objetivo para la protección de la salud (120 microgramos por metro cúbico como media de ocho horas consecutivas) en 65 ocasiones en diferentes estaciones de la Red.
El documento muestra los datos recabados en las nueve estaciones de medición que forman la Red de Control de la Contaminación Atmosférica de Valladolid (RCCAVA) y que a lo largo de 2008 recibió la acreditación ENAC como laboratorio de ensayos bajo la norma ISO 17.025, con lo que se convierte en la primera en lograr este título, ha destacado León de la Riva, que ha insistido en que los datos están disponibles de forma diaria “en tiempo real” para todos los ciudadanos a través de la web del Consistorio.
Esta red controla actualmente cinco tipos distintos de contaminantes atmosféricos. En concreto, para la medición del dióxido de nitrógeno, cuyo origen principal es el tráfico de todo tipo de vehículos con motor de combustión interna, se cuenta con ocho monitores automáticos, mientras que para el ozono, el número de medidores es de 5, uno más que para controlar las partículas de tamaño inferior a 10 micras. En el caso del dióxido de azufre y el monóxido de carbono, son tres los monitores automáticos que se encargan de su medición.
El SO2 y el CO, contaminantes residuales
Según ha precisado el alcalde, el informe refleja que los datos relativos al dióxido de azufre y monóxido de carbono “siguen confirmando que se trata de dos contaminantes prácticamente residuales, con concentraciones en el ambiente muy bajas”. En cuanto al dióxido de nitrógeno, ha detallado que tan sólo se ha superado en una ocasión el valor límite de protección de la salud humana, que establece una media anual para cada estación de 44 microgramos por metro cúbico, aunque la superación ha sido de apenas un microgramo y ha achacado el descenso en la concentración de este elemento a la incorporación de catalizadores en la flota de vehículos.
El contaminante con mayor incidencia hoy por hoy en las ciudades, el material particulado (de tamaño inferior a 10 micras), procedente en buena medida de las emisones de los vehículos con motor diésel tan sólo superó un día el límite de 50 microgramos por metro cúbico de media diaria establecido por la legislación. Esta superación se dio en la estación de Arco de Ladrillo II. El alcalde ha precisado no obstante que los datos son “provisionales” a la espera de que se produzca una eventual intrusión de polvo africano (un fenómeno común), que haría incluso que “ninguna estación de la red sobrepasase los valores establecidos como límite”.
En lo referente al ozono, durante el año pasado no se rebasaron ni el umbral de alerta a la población ni el de información a la población, sin embargo, se superó hasta en 65 ocasiones el Valor objetivo para la protección de la salud, establecido en 120 microgramos por metro cúbico como media de ocho horas consecutivas. En concreto, la mayor parte de las superaciones se registraron en la estación de Fuente Berrocal (25), seguida de la del Paseo del Regueral (15), el Paseo del Cauce (14), Vega Sicilia (9) y Cementerio del Carmen (2), zonas todas ellas fuera del casco urbano.
A juicio del alcalde, medidas como la restricción en la circulación de vehículos pesados por la ciudad, la eliminación de las calderas de carbón y la renovación del parque móvil han sido algunas de las causas de que el nivel del aire en la ciudad haya sido “espectacular” durante 2008. En este sentido ha señalado que durante 2009 se seguirá insistiendo en estos puntos además de potenciarse otras medidas como el uso del transporte público.