Ciencia España , Castilla y León, Miércoles, 10 de abril de 2013 a las 15:48

Valladolid y Palencia estrenan los primeros puntos de carga rápida del vehículo eléctrico en la región

Hasta el momento solo Vitoria y Cantabria tenían infraestructuras de este tipo, que permiten recargar la batería en menos de 30 minutos

CGP/DICYT Dos estaciones de servicio de Repsol en Valladolid (la del Camino Viejo de Simancas) y en Palencia (la de la Avenida de Asturias) cuentan desde hoy con infraestructuras de carga rápida del vehículo eléctrico. El sistema permite recargar hasta el 80 por ciento de la batería en menos de 30 minutos como ha señalado Miguel Palacio, de IBIL (empresa que ha desarrollado la tecnología), quien ha destacado en declaraciones recogidas por DiCYT que se trata de los dos únicos puntos de recarga de este tipo en Castilla y León y de los primeros a nivel nacional, donde sólo se han instalado en Vitoria y Cantabria.

 

El sistema de carga, que tiene un coste cercano a los 15.000 euros, se ha desarrollado en colaboración con Nissan Iberia, cuyo director del Proyecto Cero Emisiones, Javier Redondo, ha incidido en que el vehículo eléctrico y el despliegue de puntos rápidos de recarga son “imprescindibles” para la movilidad sostenible. Según los cálculos, recargar la batería con este sistema puede costar entre 4 y 5 euros, aunque las ventajas son múltiples. “No solo medioambientales, también económicas, ya que países con dependencia del petróleo pueden controlar así los vaivenes de su precio”, ha apuntado.

 

Por su parte el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva, ha asegurado durante la presentación del punto de carga rápida de la ciudad que de esta forma “se soluciona uno de los problemas que reclaman los usuarios, el tiempo de recarga”. Del mismo modo, ha subrayado que se debe “tomar conciencia” del uso del coche eléctrico como único vehículo “que no contamina nada”.

 

Finalmente Tomás Villanueva, consejero de Economía y Empleo, ha explicado que en 2010 se aprobaba la estrategia regional para el desarrollo del vehículo eléctrico con tres objetivos principales, “fomentar la industria asociada a la movilidad eléctrica, activar el mercado del vehículo eléctrico a través de la divulgación y desarrollar infraestructura”. En la actualidad, agrega, Castilla y León cuenta con 130 puntos de recarga lenta, “más de un tercio de los 300 puntos previstos para 2015”. Por otro lado, ha hecho hincapié en que los retos se centran ahora en “alcanzar los 860.000 puntos de recarga en Europa en 2020” y en “homologar los conectores a nivel europeo”.

 

Reunión sobre electromovilidad

 

Villanueva ha recordado que hoy se celebra en Bruselas una reunión del Intergrupo del Automóvil del Comité de las Regiones organizada por la Junta de Castilla y León, en torno a la electromovilidad, con el objetivo de analizar el vehículo eléctrico y las estrategias de empresas y regiones para fomentar su despegue. En la reunión han participado cinco regiones europeas que han presentado ejemplos de acciones de éxito en el ámbito de la movilidad eléctrica: Castilla y León, una de las primeras regiones en aprobar una Estrategia Regional para el Vehículo Eléctrico, Emilia-Romagna (Italia), Bretaña (Francia), Galicia y Estiria (Austria). A su vez, han asistido tres empresas del sector de la electromovilidad: IBIL, empresa centrada en infraestructuras de recarga en España; y las multinacionales Nissan y Renault, que han dado a conocer sus estrategias en materia de infraestructuras, industria o activación de la demanda de vehículos eléctricos.


Asimismo han asistido dos importantes redes europeas, HYER, la red europea de regiones para el hidrógeno y la electromovilidad, y la recién creada Plataforma Europea para la Electrificación del Transporte Terrestre, que han fomentado el intercambio entre empresas, regiones e instituciones europeas.

 

Sistemas de carga rápida

 

La carga rápida reduce los tiempos de recarga a unos 30 minutos frente a las varias horas de la carga normal nocturna. Los equipos instalados tienen una potencia de 50 kilovatios y realizan la recarga mediante el protocolo CHAdeMO, tecnología desarrollada en Japón cuyo nombre es, precisamente, un juego de palabras en lengua japonesa que hace referencia al tiempo que se tarda en tomar una taza de té. Esta tecnología es compatible con numerosos fabricantes de coches eléctricos como Nissan y otras marcas. Los cargadores CHAdeMO son compatibles con más de 70.000 coches a nivel mundial lo que supone más del 90 por ciento del mercado de vehículos eléctricos.