Medio Ambiente México , Baja California Sur, Mi茅rcoles, 20 de julio de 2022 a las 09:13
COLUMNA | SOMOS MAM脥FEROS

Los cargan en una bolsa al nacer

Hay un grupo de mam铆feros que al momento de nacer son extremadamente poco desarrollados, altriciales. Para poder mantenerse vivos bajo estas condiciones se desplazan a una bolsa de piel en la que terminan su desarrollo.

Alina Gabriela Monroy-Gamboa y Sergio Ticul Álvarez-Castañeda/CIBNOR/DICYT El grupo de verdaderos mamíferos que se considera más primitivo es el de los marsupiales (Infraclase Marsupialia). Este grupo se caracteriza, entre otras cosas por tener un saco de piel en el abdomen, llamado marsupio en el que se encuentran los pezones y donde la cría termina su desarrollo. Pero como todo, cuando se trata de seres vivos, hay excepciones, existen especies de marsupiales que no tienen marsupio con la capacidad de trasportar a las crías.


El marsupio es una bosa o pliegue de piel que se encuentra sostenida por los huesos marsupiales o epipúbicos, exclusivos de este grupo. Por lo general, pueden tener la abertura en dirección posterior, anterior o ventral. El más característico es el de apertura ventral por ser el que tienen los canguros, que es la especie más representativa de los marsupiales. El marsupio tiene la misma función que el útero en los mamíferos placentados, le proporciona al feto, la temperatura, protección y todo lo necesario para completar su desarrollo. Este método reproductivo dentro de los mamíferos se considera el segundo más primitivo después del huevo, siendo el más evolucionado el denominado como placentario, que es el que presenta la mayoría de los mamíferos.


Los marsupiales físicamente se caracterizan por el marsupio, pero en realidad su verdadera diferencia es su tipo de reproducción y su anatomía. Los marsupiales tienen una cloaca, que es una estructura en la que se descargan de manera conjunta los desechos sólidos, líquidos y también es el acceso al aparato reproductivo de las hembras. En el caso de los machos tienen un pene, pero este únicamente tiene un conducto para el trasporte del semen y no es utilizado por el sistema urinario. En este grupo de mamíferos no existe la placenta (estructura que envuelve al feto dentro del útero femenino) como en el caso de los otros mamíferos. Al inicio de su desarrollo se crea una coriovitelo-placenta que está formada por el saco vitelino y el corion, posteriormente se desarrollan una serie de arrugas que sujetan el embrión a la pared uterina. Los vasos sanguíneos coriónicos están conectados con el vaso sanguíneo vitelino del saco vitelino. En realidad, esta estructura se asemeja a un huevo, solo que se encuentra dentro de la misma madre, y no presenta un cascarón. En su origen, ese “pseudohuevo” tiene una gran cantidad de vitelo. El útero secreta una sustancia parecida a la leche, que es incorporada al saco vitelino. Bajo estas condiciones se desarrolla el feto, pero al carecer de placenta debe de ser parido muy prematuramente. Es entonces cuando la hembra marca un camino con saliva desde la cloaca hasta los pezones, el cual será recorrido por la cría para llegar a las glándulas lactógenas y poder alimentarse para continuar con su desarrollo. Según la especie de marsupial, el pezón puede estar dentro del marsupio o en la región ventral. La marca del camino de la madre es para facilitar el andar de la cría y ayudar con una guía olfativa a marcar la ruta. Es por ello que las crías son consideradas como altriciales, que están subdesarrolladas en el momento que son paridas, pero con la ayuda de sus padres maduran después del nacimiento.


Algunas especies pueden tener al mismo tiempo tres crías en diferentes estados de desarrollo. Una utiliza el marsupio como protección, más que alimentación. La segunda puede estar conectada a uno de los pezones recibiendo la leche para su desarrollo. La tercera puede ser un óvulo que se encuentra ya fecundado dentro de la madre en periodo de pausa, para que cuando la cría que está ocupando el pezón para alimentarse lo libere y entonces pueda ser parido precozmente y pueda desplazarse al marsupio, conectarse al pezón correspondiente y continuar su desarrollo y crecimiento.


El sistema reproductivo también es diferente. Las hembras de la mayoría de las especies tienen dentro de la cloaca dos vaginas, cada una con su útero y durante el parto se conecta a una tercera vagina central que puede ser permanente o temporal. También tienen la capacidad de almacenar esperma en el oviducto después del apareamiento.


En contraparte el pene es bifurcado en dos columnas para poder ingresar las diferentes vaginas, además el pene se guarda en la cloaca. El sistema reproductor de los machos carece de báculo, ampollas, vesículas seminales y glándulas coagulantes independientemente de la especie de marsupial de la que se trate.


Los marsupiales son especies más comunes de lo que se considera, además de que no solamente se distribuyen en el continente de Oceanía, sino que prácticamente un tercio de ellas se encuentran en Sudamérica y seis en México. Este grupo se considera la segunda radiación de los Theria (todo el tipo de especie de mamíferos y similares). En los marsupiales se pueden encontrar prácticamente todos los equivalentes ecológicos a los mamíferos actuales, a excepción de los voladores (murciélagos) y marinos (ballenas y delfines). A finales de la era Paleozoica, en la Tierra existía solamente un continente llamado Pangea, el cual, con el tiempo se dividió en dos, Laurasia (continentes del norte) y Gondwana (continentes del sur); en ese momento fue cuando se originaron los marsupiales hace aproximadamente 180 millones de años. Los registros y especies más primitivas se encuentran en Sudamérica, de donde se separó la Antártida y después Oceanía. Al no existir una invasión natural de especies placentadas, éstas se dispersaron y ocuparon los diferentes hábitats que se encontraban disponibles.


La característica distintiva de los marsupiales es la bolsa ventral de piel en la que llevan a sus crías, pero su función principal no es el transporte, sino el de proteger y brindar nutrientes a la cría que ha nacido en estado altricial, para que ésta complete su desarrollo.

 

Autores

 

Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, S. C. Instituto Politécnico Nacional 195, CP. 23205, La Paz, Baja California Sur, México. Email beu_ribetzin@hotmail.com (AGM-G), sticul@cibnor.mx (STA-C).