La Universidad Pontificia de Salamanca e Indra forman una alianza tecnológica

JPA/DICYT La Universidad Pontificia de Salamanca y la compañía informática Indra han suscrito hoy un convenio por el cual refuerzan su colaboración en actividades de investigación, desarrollo y formación, que se inició en 2007 con la firma de un acuerdo marco. El acuerdo supondrá la creación de una beca, un máster, seminarios y proyectos de I+D conjuntos en el marco del desarrollo de software, que es la misión de las instalaciones que tiene la multinacional en Salamanca, donde trabajan un centenar de profesionales.

Para Santiago Roura, director general de Indra, se trata de un "acuerdo muy relevante", puesto que la empresa ha apostado "por tener una presencia activa en Salamanca ligada a la universidad para desarrollar tecnología, no hay un mejor socio para aportarnos talento y capacidades", ha afirmado, en declaraciones recogidas por DiCYT. Por ello, "nos presentaremos juntos para desarrollar distintas iniciativas", ha añadido.

Indra es, según sus responsables, "la compañía de referencia en tecnología" con 30.000 profesionales en todo el mundo, 20.000 de ellos en España. Según los datos que han dado a conocer hoy, son "la segunda compañía que más invierte en I+D" en el país y "la primera en cuanto a porcentaje de ingresos". La empresa de nuevas tecnologías cuenta con un centenar de personas en Salamanca y se traslarará próximamente al Parque Científico de la Universidad de Salamanca, en Villamayor. Desde allí desarrollará,, como lo viene haciendo hasta ahora, proyectos "para ámbitos globales".

El centro de Salamanca forma parte de la red de Indra de más de 20 factorías de software en todo el mundo. "El límite estará donde lo pongamos nosotros, existe materia prima, porque tenemos facultades de Informática y buenas comunicaciones”, ha afirmado Santiago Escribano, director de Indra Software Labs. El hecho de estar en el Parque Científico "nos permitirá más facilidades a la hora de presentarnos a proyectos europeos", además, "es nuestro espacio natural", ha señalado.
 

Por su parte, el rector de la Universidad Pontificia, Marceliano Arranz, ha hecho referencia también a la posibilidad de que, en un futuro, ambas partes desarrollen algún proyecto conjunto con financiación europea. Además, ha abierto la puerta a la implantación de "algún título propio específico" para las necesidades de Indra, además del máster que se pondrá en marcha con este acuerdo.

Entre los puntos más relevantes de dicho convenio, destacan la creación de una línea conjunta y permanente de proyectos de I+D y la organización de diversas actividades de formación y transferencia tecnológica. Todas las acciones se canalizarán a través de una comisión mixta de trabajo que se encargará de coordinar, fomentar y regular la participación de Indra y de la UPSA en proyectos de interés común.

Colaboraciones docentes

Además de las actividades conjuntas de investigación y desarrollo tecnológico en proyectos de "alto contenido innovador", el convenio contempla la adjudicación de una beca para la realización por parte de un alumno de la UPSA de su tesis doctoral y la organización de un máster conjunto. La beca será convocada por la Universidad Pontificia mediante concurso de méritos entre los alumnos de último curso de la licenciatura y financiada íntegramente por Indra. Por su parte, el máster será impartido por el profesorado de la Universidad y también contará con la aportación docente de la compañía.

La colaboración se extenderá también a la organización de seminarios de carácter internacional sobre proyectos de investigación desarrollados por grupos de investigación conjuntos con el objetivo de transferir los resultados obtenidos.

Presencia en Castilla y León

Además del Software Lab de Salamanca, Indra cuenta con otras instalaciones en Castilla y León. En Valladolid está el Centro de Desarrollo del Parque Tecnológico de Boecillo, mientras que en León ha abierto el Centro de Excelencia en Sistemas de Seguridad y el Centro de Respuesta a Incidentes Informáticos. En el conjunto de la región ha creado ya casi 250 puestos de trabajo de alta cualificación, que se ampliarán con el traslado del equipo de Salamanca al Parque Científico, que tendrá lugar a finales de enero de 2010.