La población de palomas de Ávila se ha reducido en un 58% en tres años
MMG /DICYT La población de palomas de Ávila se ha reducido entre un 58 y un 64 por ciento desde que se realizara el primer censo de este tipo, en el año 2006. Así lo anunció ayer Carlos Bernabeu, responsable de la empresa Arbórea, la entidad encargada del trabajo, que presentó los datos del último censo realizado por el Ayuntamiento.
Según estos datos, que acabaron de recopilarse este mismo jueves, actualmente vuelan en el cielo de Ávila entre 1.626 y 1.756 palomas, una cifra alejada del censo del año 2006, cuando se registraron entre 3.812 y 4.885 palomas, y también inferior a las 2.805-3.029 del censo de 2007.
La reducción de aves se encuentra, según Bernabeu, por encima de las expectativas del 50 por ciento que se habían marcado. Pero, aún así, él mismo reconoce que "todavía no se ha llegado al umbral aceptable desde el punto de vista social, higiénico y saludable".
De hecho, según este experto en aves, lo ideal sería la "reducción drástica" de la población de palomas, alcanzando los 500 ejemplares. "Pero las palomas de Ávila ya crían durante todo el año, algo que era impensable hace tiempo", asegura, "por lo que la producción sigue aumentando".
Además, en la ciudad continúan existiendo una docena de "puntos negros" para la cría de palomas: edificios en ruinas o deshabitados donde estas aves encuentran los refugios ideales para vivir y críar.
Para llevar a cabo el censo, los técnicos de Arbórea disponen de cuatro puntos de control, en los Cuatro Postes y el Cerro Hervero y en las zonas Noreste y Sur de la Muralla. "Realizamos el conteo a través de medios ópticos entre las ocho y las once de la mañana", explica Bernabeu, "y aplicamos un factor de correción de entre el 25 y el 35 por ciento".
![]() |
El dormidero artificial, al 100% tras el verano |
El Ayuntamiento de Ávila puso en marcha hace tres meses un dormidero artificial de estorninos, un sistema experimental y pionero del control de estorninos para combatir otra de las grandes plagas de aves que sufre la ciudad. El dormidero, que tiene capacidad para 50.000 ejemplares, dispone de varios puntos de alimentación; calefactores de rayos infrarrojos y altavoces con sonidos de estorninos. |