Salud España , Salamanca, Viernes, 20 de febrero de 2009 a las 18:08

La investigación en esclerosis múltiple trata de explicar los mecanismos que provocan el daño cerebral

Pablo Villoslada, uno de los especialistas españoles más reconocidos, presenta en Salamanca un tratamiento para controlar en parte los efectos de la enfermedad

JPA/DICYT Pablo Villoslada, científico del Hospital Clinic de Barcelona y uno de los especialistas españoles más reconocidos en el campo de la esclerosis múltiple, ha explicado hoy en Salamanca cuáles son las principales líneas de investigación en esta enfermedad que afecta al sistema nervioso central, más frecuente en personas jóvenes. Entender los mecanismos que provocan los daños cerebrales es la clave de las investigaciones, pero también se trabaja en la búsqueda de biomarcadores que ayuden al diagnóstico a través de neuroimagen y tratamientos que ayuden a controlar los efectos de esta patología, entre ellos, uno que ha presentado este experto hoy en el Instituto de Neurociencias de Castilla y Léon (Incyl).

 

"El principal interés en este momento es conocer por qué se daña el cerebro, sobre todo la sustancia gris", ha señalado Villoslada en declaraciones a DiCYT. La esclerosis múltiple se caracteriza por ser una patología neurodegenerativa e inflamatoria que afecta a las células nerviosas y a la mielina, una especie de vaina que recubre las fibras nerviosas. Sin embargo, los estudios están indicando que los axones (prolongaciones de las neuronas que transmiten los impulsos nerviosos) se dañan más que la mielina, según el especialista, que también es profesor de Neurología de la Universidad de Navarra.

 

En la actualidad, "contamos con tratamientos que mejoran el curso de la enfermedad, pero nos gustaría tener terapias que ayuden a evitar el daño de las redes nerviosas y, si fuese posible, a regenerarlas", apunta. En concreto, Villoslada ha explicado en el Incyl cuál es el papel de la metiltioadenosina, "un fármaco que protege al cerebro contra la inflamación".

 

Además del estudio de los mecanismos y del tratamiento, una tercera línea consiste en encontrar biomarcadores, "métodos diagnósticos que nos permitan establecer un pronóstico, ver si un paciente responde al tratamiento y hacerle un seguimiento eficaz", algo que podría perfeccionarse con estudios de imagen con resonancia ya que, en definitiva, "buscamos métodos que nos permitan poder monitorizar la enfermedad", comenta el científico.

 

Enfermedad multifactorial


La esclerosis múltiple es "una enfermedad multifactorial, no se debe a una única causa, sabemos que hay personas que tienen una cierta predisposición, pero también hay factores que tienen que ver con el historial de infecciones que ha tenido una persona y que puede provocar que sus defensas no aprendan de forma correcta y reaccionen en exceso, con lo cual acaban apareciendo inflamaciones", explica Villoslada.

 

Las enfermedades inflamatorias son "propias de personas jóvenes y probablemente eso tenga que ver con la maduración de las defensas". Según apunta, "el sistema inmune va aprendiendo durante la infancia y a partir de la pubertad es un mecanismo adulto, pero en algunos casos, si el aprendizaje no ha sido bueno, puede provocar inflamaciones".

 

"Investigamos tratamientos para personas que ya tienen la enfermedad, pero buscando que esté más controlada, detener el curso de la enfermedad", afirma. "Alguno de estos tratamientos podrían plantearse en un futuro para prevenirla, pero para eso tendríamos que saber quién tiene mayor riesgo de tenerla y deberíamos contar con un test diagnóstico que nos permitiera saber quién está a punto de desarrollarla y para eso aún nos queda tiempo".

 

Factores genéticos poco conocidos

 

"Sabemos que los familiares tienen más riesgo, pero aún no sabemos mucho de los factores genéticos. Estudios en este sentido en el futuro nos permitirán identificar personas que tengan facilidad y, sobre ellos, hacer algún tipo de chequeo sobre enfermedades inflamatorias y realizar tratamientos cómodos y seguros para quienes presenten un alto riesgo", señala.

 

En la actualidad, hay unos 70 u 80 pacientes cada 100.000 habitantes, con lo cual significa que en España la esclerosis múltiple afecta a 35.000 personas y que se diagnostican cada año unos tres casos por cada 100.000 habitantes.