Ciencia España Santa Eulalia de T谩bara, Zamora, Jueves, 14 de enero de 2010 a las 15:59

Documentan tres habitaciones diferentes en una excavaci贸n arqueol贸gica en Santa Eulalia de T谩bara (Zamora)

Entre los hallazgos de la excavaci贸n se encuentran piezas de cer谩mica, unas pinzas y botones de hueso

IBS/DICYT Conocer y documentar el modo de vida de los pobladores de la provincia de Zamora entre los siglos IV y VI a.C. Ese es el principal objetivo del Proyecto de Investigación y Difusión sobre el Patrimonio Arqueológico Protohistórico de la Provincia de Zamora, cuyo codirector, José Carlos Sastre, ha presentado hoy los resultados de la excavación del pasado mes de agosto, la tercera que se realiza en el castro de El Castillón, en la localidad zamorana de Santa Eulalia de Tábara.


Esta excavación ha mostrado la estructura de las viviendas que tenían los habitantes de esta zona, que tenían al menos tres habitaciones diferentes en cada vivienda, “con lo que sabemos más de la estructura de los espacios en los que habitaban los pobladores de estas zonas en una etapa tardoantigua", ha detallado Sastre.


La excavación de uno de los espacios, destinado a un supuesto almacén, ha permitido recuperar "una gran cantidad de piezas de cerámica, sobre todo decoradas con motivos estampillados". Además, los arqueólogos han podido recuperar piezas singulares "como unas pequeñas pinzas de bronce, una cuenta de collar de vidrio, piedras de molino circulares, un botón de hueso decorado o un fragmento de un pendiente de bronce". Algunas de estas piezas, "parecen indicar la posibilidad de que, anteriormente, se encontrase en esta zona un emplazamiento de la Edad del Hierro", ha puntualizado José Carlos Sastre.


Además, en excavaciones de años anteriores, han encontrado diferentes piezas como hebillas, clavos, un osculatorio, escorias, cuchillos, punzones, arandelas, etc, que han determinado la presencia de objetos de cobre, hierro y bronce. Especialmente importante es el procesado de elementos de hierro de buena calidad, como por ejemplo el caso de una pieza denominada como osculatorio, de difícil interpretación hasta el momento y de la que se han podido realizar los primeros análisis de composición, que han reflejado la presencia de Zinc en este tipo de piezas, que se realizan a molde, para dotarlas de una mayor consistencia a la hora de realizar el grabado de las diferentes partes anatómicas de las figuras representadas, aunque aún no está muy claro para qué servía.

 

En la excavación participaron 74 arqueólogos de 18 universidades españolas y 11 extranjeras procedentes de Estados Unidos, Canadá, Portugal o Reino Unido. De cara al próximo año, Sastre ha confiado en que la Junta de Castilla y León apruebe la segunda parte del proyecto que han presentado, "para poder continuar con la excavación y documentar más zonas del castro, porque es muy grande y puede aportar mucha información sobre el tipo de vida que tenían".