Alimentación España , Madrid, Jueves, 22 de noviembre de 2012 a las 13:33

Desvelado el ‘árbol genealógico’ de las ratas de las raíces

El CSIC realiza el primer análisis de las relaciones evolutivas de todas las especies de la subfamilia de roedores Rhizomyinae

CSIC/DICYT Un equipo internacional de investigadores liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha realizado el primer análisis de las relaciones evolutivas de las especies, actuales y fósiles, que componen la subfamilia de roedores muroideos Rhizomyinae. Los resultados del estudio, publicado en Cladistics, muestran que el origen de las especies africanas de estos roedores cavadores es fruto de múltiples fenómenos de dispersión desde Asia durante el Mioceno (hace entre 23 y 5 millones de años aproximadamente).

 

“Los Rhizomyinae presentan actualmente un área de distribución discontinua, ya que solo se encuentran en el Sureste asiático y en el Este de África. Hasta ahora, las relaciones entre los asiáticos, como las ratas del bambú, y los africanos, como las ratas topo, eran un enigma, pero gracias a este estudio hemos podido descifrar su evolución”, explica la investigadora del CSIC Raquel López-Antoñanzas, del Museo Nacional de Ciencias Naturales.

 

Hoy en día, esta subfamilia de roedores está compuesta por tres géneros: los asiáticos Cannomys y Rhizomys y el africano Tachyoryctes. “A pesar de su escasa diversificación actual, gracias a los restos fósiles de más de 30 especies que se han ido descubriendo, sabemos que estos animales tuvieron un pasado floreciente”, añade la investigadora.

Cinco migraciones

Los roedores Rhizomyinae, explica el estudio, son originarios de Asia y desde allí protagonizaron hasta cinco dispersiones, tres durante el Mioceno inferior y dos más durante el superior. Las tres primeras dieron lugar a las especies Prokanisamys sp. de Libia y a los taxones kenianos Pronakalimys y Nakalimys. En la primera de las migraciones del Mioceno superior apareció la especie etíope Protachyoryctes makooka, mientras que la segunda es el origen de todas las especies africanas actuales.

 

El estudio ha contado con la participación del Museo Peabody de Arqueología y Etnografía, de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos.