Espacio España , España, Miércoles, 26 de octubre de 2011 a las 19:10

Descubren que el planeta enano Eris podría ser más pequeño que Plutón

El hallazgo de Eris, que se consideró mayor que Plutón en tamaño, contribuyó a que la Unión Astronómica Internacional dejase de considerar a éste último como planeta

CSIC/DICYT Un grupo internacional de astrónomos, en el que participan investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha estudiado el paso de Eris por delante de una estrella y ha medido su tamaño con más precisión que nunca. Los resultados del estudio, que se publica en la revista Nature, reducen considerablemente el tamaño de Eris y lo convierten, si no en un objeto menor que Plutón, sí en un objeto de igual tamaño. En esta investigación han participado investigadores del CSIC en el Instituto de Astrofísica de Andalucía y en el Centro de Astrobiología (centro mixto del CSIC y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial).
 

En 2005 se descubrió Eris. Los primeros cálculos sobre este objeto señalaban que su tamaño superaba el de Plutón y, aunque en un principio se habló de décimo planeta, finalmente se impuso una redefinición del concepto de planeta que no incluía ni a Eris ni a Plutón. La Unión Astronómica Internacional decidió que ambos pasaran a integrar una nueva categoría de objetos, los planetas enanos, reduciendo el número de
planetas del Sistema Solar de nueve a ocho.


El investigador del CSIC en el Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC), José Luis Ortiz, detalla el descubrimiento: “Los nuevos datos han supuesto una sorpresa, ya que se ha reducido el radio estimado de Eris a unos 1.163 kilómetros. Estos cálculos se encuentran muy por debajo de los anteriores, que lo situaban entre 1.200 y 1.400 kilómetros, y que convirtieron a Eris en el mayor objeto del Cinturón de Objetos
Transneptunianos, una región más allá de Neptuno poblada por cuerpos rocosos y helados”.


Ahora parece que Plutón, con un radio de entre 1.150 y 1.200 kilómetros, podría recuperar el puesto como el mayor objeto de esta región. "No obstante, esto es difícil de precisar ya que Plutón tiene una atmósfera que interfiere en las medidas del diámetro. En el caso de Eris se ha determinado, mediante la ocultación, que, en caso de tener atmósfera, esta sería miles de veces menos densa que la de Plutón",
puntualiza Ortiz.


Este estudio ha determinado además que el albedo de Eris (la fracción de luz reflejada con respecto a la que incide), es al menos del 90%, lo que lo convierte en uno de los objetos intrínsecamente más brillantes del Sistema Solar (solo algunas lunas de Saturno reflejan más porcentaje de luz que Eris). Su masa y densidad, mayores que la de Plutón, sugieren que se trata de un cuerpo en su mayoría rocoso y cubierto de una
capa de hielos.
 

La ocultación más lejana


Eris se halla tres veces más lejos que Plutón y se encuentra en una región con pocas estrellas, de modo que las ocultaciones son muy poco habituales y difíciles de estudiar. De hecho, inicialmente se pensó que esta ocultación no se vería desde la Tierra.

 

"Nosotros alertamos de que la predicción inicial era errónea e insistimos en la importancia de observar esta ocultación con el mayor número de telescopios posible", destaca el investigador del CSIC. De la red de 26 telescopios que apuntó hacia Eris la noche del 6 de noviembre de 2010, solo tres detectaron la ocultación, entre ellos el telescopio de 40 centímetros de San Pedro de Atacama (Chile) perteneciente al instituto andaluz del CSIC y a Astroimagen.

 

"Se trata del objeto más lejano del Sistema Solar estudiado mediante una ocultación, lo que permite determinar su posición con una precisión exquisita, muy valiosa para estudiar su movimiento orbital. Esto es relevante, ya que la fuerza de la gravedad solar no se ha podido medir nunca a tan lejanas distancias de una manera fiable" destaca
Ortiz.