Validan un sistema que mide el riesgo de sufrir arteriosclerosis
José Pichel Andrés/DICYT Investigadores españoles han realizado un estudio para validar en población europea un dispositivo de origen japonés que predice el riesgo cardiovascular. Mediante una prueba muy sencilla, que mide simultáneamente la presión arterial en las cuatro extremidades y realiza un electrocardiograma, predice aspectos como la probabilidad de sufrir arterioesclerosis. Alrededor de 2.500 pacientes de Castilla y León, Cataluña y Baleares han participado en las pruebas y los científicos van a comenzar a publicar los resultados.
Los científicos de la Unidad de Investigación del Centro de Salud La Alamedilla de Salamanca, donde han realizado la prueba unas 500 personas, han explicado a DiCYT que el estudio intenta valorar qué aportan las medidas que realiza la nueva herramienta, denominada Vascular Screening System (VaSera) a las ecuaciones de riesgo para indicar el riesgo cardiovascular. Añadir esta variable podría mejorar las predicciones.
“Este aparato está bastante distribuido en Asia, en países como Japón y Corea, pero en Europa no, así que uno de los objetivos de este estudio es validar sus mediciones con población europea”, destaca Luis García Ortiz, médico de La Alamedilla y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Salamanca.
La prueba es muy sencilla y apenas lleva cinco minutos: el sujeto se tumba en una camilla y se le colocan cuatro manguitos de presión arterial, uno por cada una de las extremidades. De esta forma, “el sistema mide la presión arterial simultáneamente en cuatro puntos y, a la vez, realiza un electrocardiograma”, señala José Ignacio Recio, otro investigador de La Alamedilla. Con esta información se elabora una serie de datos útiles para conocer el estado cardiovascular del paciente.
Por ejemplo, se mide un parámetro que los especialistas conocen como ‘distensibilidad’ arterial, la capacidad que tienen los vasos sanguíneos para distenderse y contraerse apropiadamente en respuesta a los cambios de volumen y de presión del flujo sanguíneo. Esta medida es independiente de la tensión arterial.
Posibles ventajas
Hasta ahora, la clave para comprobar la rigidez de las arterias es otro parámetro, conocido como velocidad de onda del pulso, pero esta medida se ve influenciada por la tensión arterial. La medida conocida como CAVI que ofrece el sistema japonés es muy parecida, pero excluye la presión arterial, de ahí su utilidad. Los expertos auguran que ser un parámetro que en un futuro próximo “se utilice para evaluar el estadio de las arterias” y sobre todo destacan que puede “predecir la probabilidad de una arteriosclerosis”, un endurecimiento generalizado de las arterias que causa su estrechamiento hasta impedir la normal circulación de la sangre.
Los investigadores españoles, que próximamente irán publicando los resultados en revistas científicas, ya han sido invitados a presentar las conclusiones en Japón por parte de la empresa que comercializa el aparato. Se trata de un dispositivo cuyo coste podría ser asumible para los centros de salud públicos, según los especialistas, siempre que se demuestre su utilidad real y quede validado en población occidental.