Un tercio de la cuenca del Torío comprende zonas de flora con interés de conservación alto o muy alto
Antonio Martín/DICYT Desde sus fuentes en el puerto de Piedrafita o en el Pico Huevo hasta su fusión con el Bernesga, la cuenca del río Torío cuenta una vegetación que, en un tercio de su extensión, tiene interés de conservación alto o muy alto. Una extensa cargografía realizada por un investigador del Área de Botánica, en el Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambental, de la Universidad de León así lo recoge. Fermín del Egido ha mapeado y valorado la flora y la vegetación de esta cuenca para proporcionar a la Administración aplicaciones a la gestión y ordenación del territorio. El autor recomienda que no se realicen "actuaciones agresivas" en un tercio de este extensa área, que comprende unas 500.000 hectáreas, situadas especialmente en los primeros tramos de los ríos.
"La cartografía aporta un conocimiento detallado de la vegetación de la zona y puede servir como base para posteriores estudios de impacto ambiental", explica a DiCYT el investigador. Este mismo trabajo permitió la descripción de 15 nuevas especies para la ciencia en el entorno de este río, que nace en la Cordillera Cantábrica y recorre 65 kilómetros antes de desembocar en el Bernesga a la altura de la ciudad de León. Estas especies pertenecen a dos géneros muy próximos entre sí, las asteráceas Hieracium y Pilosella, dos plantas de largos tallos y coronados por flores amarillas, y un híbrido del género Genista. La cartografía está elaborada a escala 1:10.000 y consta de 16.676 polígonos de vegetación agrupados de 192 unidades distintas. El conjunto se prsenta dividido en 28 mapas, lo que habla de la minuciosidad del trabajo.
En el territorio hay 179 taxones de vegetales catalogados en alguna normativa de protección, aunque sólo uno contemplado como especie amenazada por el catálogo nacional, el Ranunculus parnassifolius subespecie cabrerensis. Además, hay 280 endemismos ibéricos, por lo que acoge el una octava parte (12'55%) de estos taxones propios de la península. Se han reconocido en este entorno 46 hábitats de importancia comunitaria (el 23% del total de la Unión Europea), de los que siete son prioritarios. Además, la cuenca del Torío acoge el espacio natural y lugar de interés comunitario (LIC) Hoces de Vegacervera, el LIC Montaña Central de León y la reserva de la biosfera de los Argüellos. "El territorio objeto de este estudio presenta una gran diversidad florística y vegetacional, así como una gran improtancia de cara a la conservación de la flora y la vegetación", resume Fermín del Egido.
Zonificación innovadora
El botánico propone zonificar el territorio a partir de mapas de isozonas de interés de conservación en vez de mapas de valoración de cuadrículas de un kilómetro de lado, ya que "suponen una pérdida de información y precisión". Con este innovador sistema de zonificación, existe un 35'86% del área de la cuenca se considera zona de interés de conservación muy alto o alto. Las más valiosas, las de interés muy alto, comprenden el 3'59% del territorio. Aquí el autor recomienda "ninguna actividad agresiva", impedimiento al libre acceso y sólo realizar actuaciones "con fines de conservación". En general, reconoce, estas zonas con mayor interés de conservación de la vegetación se encuentran ya protegidas. En las de interés alto, el 32'27% del territorio, sugiere "un uso público moderado", impidiendo las actividades agresivas y manteniendo las actividades ganaderas extensivas y selvícolas tradicionales. Su uso turístico o recreativo debería ser moderado.
Un área de 27'17% de la cuenca se considera de interés de conservación medio, y se proponene para ella "uso similares a los de las zonas de interés de conservación alto", aunque permitiendo un uso turístico o recreativo "más intensivo". "Algunas zonas podrían albergar infraestructuras siempre que no sean excesivamente agresivas" con el medio. Finalmente, existen zonas de conservación consideradas de bajo o muy bajo interés de conservación (el 21'47% y el 15'50% respectivamente), donde "se pueden ubicar aquellas actividades más agresivas con la vegetación que sean necesarias para el desarrollo socioeconómico de los habitantes del territorio".
Además de elaborar los mapas de valoración del interés de conservación, el biólogo analizó elvalor de interés de conservación de varios espacios. En su conjunto, la cuenca presenta un interés medio, pero hay zonas (las incluidas en el Hoces de Vegacervera) cuyo interés es alto. La Montaña Central de León y Los Argüellos se califican como de interés medio. El estado de conservación de todos estos espacios, y de la cuenca en su cojunto, es bueno.