Health Argentina , Mendoza, Wednesday, October 02 of 2013, 11:34

Un estudio en animales apunta que la progesterona previene el mal de Parkinson

Esta hormona protege a las neuronas que mueren a causa del mal de Parkinson, además de optimizar sus funciones

ARGENTINA INVESTIGA/DICYT El estudio analizó los efectos neuroprotectores y neuromoduladores de la progesterona (hormona que se produce en el organismo de modo natural y en muy pocas cantidades en el sistema nervioso). Para la experiencia, llevada adelante por el investigador Sebastián Casas como parte de su tesis doctoral, se utilizó un modelo con animales portadores de la enfermedad degenerativa de Parkinson.

 

La investigación radicó en comparar dos animales con ésta enfermedad, de los cuales uno se encontraba bajo tratamiento. Pudo observarse que en el caso del que fue tratado con progesterona se previno el desarrollo de las manifestaciones comportamentales, neuroquímicas y enzimáticas moleculares propias del Parkinson. La hormona ejerció efectos neuroprotectores sobre las neuronas dopaminérgicas que mueren producto de esta enfermedad y, a su vez, optimizó sus funciones.

 

El mal de Parkinson es un trastorno neurodegenerativo crónico que conduce con el tiempo a una incapacidad progresiva como consecuencia de la destrucción de las neuronas pigmentadas de la sustancia negra. Frecuentemente clasificada como un trastorno del movimiento, la enfermedad de Parkinson también desencadena alteraciones de la función cognitiva, en la expresión de las emociones y en la función autónoma.

 

El doctor Casas hizo hincapié en que a lo largo del desarrollo de la investigación se tuvieron en cuenta las manifestaciones premotoras y las alteraciones afectivas de los animales, como la depresión y la alteración en la memoria, y se observó que el tratamiento con progesterona previene la aparición de estas manifestaciones en los animales enfermos.

 

Asimismo, el investigador explicó a Argentina Investiga que “los resultados obtenidos de la investigación son alentadores, dado que cuando se diagnostica la enfermedad, la muerte neuronal es del 80% y el proceso degenerativo ya está en su parte final, lo cual resulta irreversible”. Respecto de la importancia de los indicios previos a la detección del Parkinson, Casas aseguró: “Existen ciertos síntomas que anteceden a las manifestaciones concretas de la enfermedad, por ejemplo, el trastorno en el sueño, las alteraciones en el estado del ánimo y la pérdida de la memoria, que pueden ser indicios de que el paciente desarrolle de aquí a 10 años la enfermedad de Parkinson”.

 

En referencia a los resultados obtenidos, el investigador cita dos experiencias que han demostrado que la administración de progesterona natural tiene un efecto protector frente a daños traumáticos cerebrales: “Estudios similares realizados en Francia aplicados en seres humanos han demostrado los efectos neuroprotectores en la esclerosis múltiple. En este caso se trabajó con pacientes embarazadas con esclerosis múltiple, y se demostró que aumentan los brotes de dicha enfermedad luego de dar a luz al bebé.

 

No obstante, el tratamiento de estas pacientes con progesterona luego del parto previno y protegió la aparición de nuevos brotes. Por otra parte -agrega el investigador- se realizaron estudios clínicos en Estados Unidos que demostraron que esta hormona previene la muerte neuronal. Esto se ha realizado en casos de pacientes con traumatismo encéfalo-craneano, donde aquellos que recibieron el tratamiento con progesterona tuvieron una significativa disminución en la mortalidad en comparación con los pacientes sin tratamiento”.

 

La experiencia realizada por Casas demuestra que la aplicación de la progesterona en animales con esta enfermedad no registra, por el momento, efectos adversos. Por lo tanto, sostiene a modo de hipótesis, que si este tratamiento se aplicara en los seres humanos con enfermedad de Parkinson, tendría un efecto beneficioso, aliviaría los síntomas y ejercería un efecto neuroprotector en las neuronas afectadas.

 

El trabajo fue presentado en las “II Jornadas internacionales de Movimientos anormales” que se desarrollaron del 11 al 13 de octubre de 2012 y estuvieron dirigidas a profesionales de la medicina y estudiantes de las carreras de salud de nuestro país. Los temas de las conferencias estuvieron orientados al Parkinson desde todos sus abordajes (genéticos, quirúrgicos, diagnósticos, terapéuticos), se presentaron los últimos avances en la búsqueda de una cura para esta enfermedad y se abordaron los movimientos anormales en las enfermedades metabólicas. Además se organizó una reunión con los investigadores de la Enfermedad de Huntington.