Los implantes cocleares en el colículo inferior podrán ser ampliados a pacientes en cinco o 10 años
AMR/DICYT Hubert Lim, investigador de la Medizinischen Hochschule (escuela de medicina, en alemán) de Hanóver ha afirmado hoy en Salamanca que los implantes cocleares en el colículo inferior, un dispositivo en el que está trabajando actualmente en fase clínica el departamento de Otorrinolaringología al que pertenece, podrán estar disponibles para personas con sordera profunda en cinco o 10 años. La principal característica de este aparato auditivo es que trabaja en regiones más profundas del cerebro de lo que lo hacen los actuales, por lo que es más efectivo.
Lim, que ofreció una conferencia en el Instituto de Neurociencias de Castilla y León (Incyl), indicó que los actuales implantes cocleares "no son eficaces si la parte del cerebro que debe interpretar los datos que llegan desde el oído interno está también dañada". Por eso, este engeneering consultant, en colaboración con el científico David Anderson, lleva trabajando desde hace ocho años en implantar una estimulación eléctrica que llegue directamente al colículo inferior, en el cerebro. Sus primeros experimentos con animales datan de esa fecha. En la actualidad, en la última fase de la investigación, cinco pacientes de todo el mundo ya disponen del nuevo dispositivo. "Cuando supere la fase clínica y se comercialice, será más barato que los actuales implantes cocleares", indica.
Durante su conferencia, el experto aseguró que el implante coclear que estimula directamente el colículo inferior presenta la ventaja de entrar directamente con las neuronas que deben interpretar los estímulos auditivos, lo que facilita la comprensión de los sonidos y del habla, y posibilita la actividad cerebral profunda. El sistema, denominado AMI (Auditory Midbrain Implant), mejora la tecnología de los ABI (Auditory Brainstem Implant), la otra técnica de implantes cocleares que llegan al cerebro, pero lo hacen al exterior.
Respecto a la diferencia con los implantes que estimulan la cóclea (también conocido como caracol, en el oído interno, de donde parte el nervio auditivo), el ponente destacó, además de que el nuevo dispositivo se dirige directamente al cerebro, "la intervención quirúrgica, dentro de la complejidad de la Neurocirugía, es más sencilla, ya que el paciente permanece con la cabeza inclinada hacia delante y el cerebelo es más accesible en esta posición".