Ciencia España , Burgos, Mi茅rcoles, 24 de febrero de 2010 a las 11:18

Los f贸siles de Atapuerca cobran vida en una novela

La escritora burgalesa Elena Garc铆a Quevedo publica 'La voz de la Tierra y la mujer cham谩n'

ERM/DICYT La autora burgalesa Elena García Quevedo presenta mañana jueves 25 de febrero a las ocho de la tarde en la Sala Polisón del Teatro Principal de Burgos su última novela que lleva por título La voz de la Tierra y la mujer chamán, una puesta de largo que correrá a cargo del codirector de las excavaciones de los yacimientos de Atapuerca, José Mª Bermúdez de Castro. Amante de la Paleontología, la escritora ha explicado a DiCYT que el origen de esta novela hay que buscarlo en un reportaje sobre Atapuerca que escribió para la revista GEO.

 

A lo largo de las páginas de este libro, iremos descubriendo algunos de los fósiles más importantes que se han encontrado en los yacimientos, entre ellos Excálibur, el hacha de piedra que fue hallada en la Sima de los huesos en 1998 y que puso de manifiesto la práctica de ritos funerarios hace 400.000 años.


La realidad y la ficción se mezclan en esta novela que transcurre en la Sierra de Atapuerca hace 500.000 años. Su protagonista es Luz, una niña curiosa que asume la misión de llevar Excálibur hasta allí, el lugar considerado como el corazón del mundo. Aparece así ante ella un viaje “que le pone por delante la vida, su especie y su clan. A lo largo de su camino se irá conociendo a sí misma, aprenderá a afrontar sus miedos y en definitiva, a realizar el viaje que todos tenemos que hacer en la vida”, apunta Elena García Quevedo. Además de la investigación que la llevó a introducirse en la Sierra de Atapuerca y a acercarse al trabajo que allí desarrollan los científicos, la inspiración para crear esta obra procede también de una tribu indígena que conoció en Colombia y que ha logrado sobrevivir y mantenerse fiel a sus credos, a su forma de entender el mundo y a su manera de sentir la tierra, comenta la escritora.

 

El significado de la misión encomendada a Luz va más allá. Ella dará con una Sierra enfrentada. Unos cuantos pobladores han encontrado el fuego y aunque no saben hacerlo, sí son capaces de mantenerlo vivo. El fuego simboliza el poder y por eso pretenden dominar esas tierras. La niña, que se va convirtiendo en mujer a medida que avanza el libro, "deberá conseguir que la Sierra vuelva a ser de todos  y siga siendo un lugar común, un lugar de encuentro para que los pobladores contacten con sabios y ancestros", señala la autora. 

 

Elena García Quevedo se resiste a desvelar el nombre de otros fósiles hallados en Atapuerca que irán cobrando vida a lo largo de la novela. “Prefiero que los lectores se entreguen a ello y los vayan descubriendo. Excálibur es la protagonista porque me resulta una pieza muy interesante, que llama la atención por su belleza. Cuando la vi por primera vez me quedé noqueada”, relata la escritora. Sí ha revelado cómo se ha imaginado la Sierra hace 500.000 años y la describe como un lugar lleno de vida y de agua, con animales como águilas, panteras, los últimos dientes de sable recorriendo la selva, ciervos gigantes, cocodrilos en el río, etc. de cuya existencia ha tenido constancia a partir de sus investigaciones.

 

Acerca de la autora


Elena García Quevedo ha firmado obras de teatro como El olor del café, películas documentales como Invisibles o Invierno en Bagdad, ganadoras del Goya al mejor documental o la Biznaga de Plata, respectivamente. Antigua corresponsal de la cadena SER en Oriente Próximo, desde hace años trabaja como periodista y guionista freelance. Publica reportajes sobre Paleontología en revistas como GEO y publicaciones como El País, Magazine o Yo donna, entre otros.