Salud España , Valladolid, Miércoles, 26 de noviembre de 2008 a las 17:46

"Lo único probado científicamente para evitar la progresión del glaucoma es reducir la presión intraocular"

30 expertos en Ciencias de la Visión actualizan sus conocimientos en diagnóstico y tratamiento de esta patología, que afecta al 2'1% de los españoles

YG/DICYT El glaucoma es un grupo de enfermedades caracterizadas por un daño en el nervio óptico asociado a un aumento de la presión ocular y afecta al 2'1% de la población española, siendo la segunda causa de ceguera a nivel mundial. Actualmente existen varios tipos de tratamientos, tanto farmacológicos, como quirúrgicos para frenar la progresión de la enfermedad, sin embargo, la ausencia de síntomas provoca que la mayor parte de los pacientes acuda tarde al especialista, por lo que los daños son ya irreversibles. En torno a una treintena de especialistas en Ciencias de la Visión han participado hoy en la XXVIII edición del Curso de Glaucoma organizado por el Instituto de Oftalmobiología Aplicada (IOBA) y el Hospital Clínico Universitario de Valladolid para actualizar sus conocimientos en el diagnóstico y tratamiento de esta patología.

 

Según ha precisado a DiCYT el coordinador del curso, el investigador del IOBA Fernando Ussa, un estudio realizado por la Universidad de Valladolid hace seis años entre la población de Segovia determinó que la incidencia del glaucoma era del 2'1%, unos datos extrapolables a toda la población española, debido a la magnitud de la muestra. Actualmente hay reconocidos hasta 44 tipos diferentes de glaucomas, aunque el más común es el de tipo Primario de ángulo abierto, sobre el que los investigadores aún no han determinado qué gen está implicado en su desarrollo, ha señalado Ussa, quien ha añadido que se trata no obstante de “una herencia multifactorial, en la que también intervienen factores ambientales”.

 

Por el momento, “lo único que existe probado científicamente para evitar la progresión de la pérdida del campo visual es la reducción de la presión intraocular”, mediante el uso de fármacos que “en los últimos 10 años han registrado un gran avance”. No obstante, el experto ha incidido en que la ausencia de síntomas provoca que “los pacientes de glaucoma acudan tarde al médico, cuando el daño es ya irreversible, de forma que el reto es que el paciente sea diagnosticado precozmente para que nunca llegue a desarrollar ceguera”.

 

Dentro del Curso de Glaucoma, el doctor Fernando Ussa ha sido el encargado de pronunciar una conferencia sobre el componente genético de esta patología ocular. En este sentido ha destacado que “el glaucoma tiene un riesgo genético, aunque no se ha determinado qué genes son los que causan cierto tipo de glaucomas”. Existe únicamente un estudio realizado en Islandia que ha determinado el gen que está implicado en el desarrollo del glaucoma de tipo seudoesfoliativo, ha precisado el investigador.


El IOBA desarrolla una lente de contacto para medir la presión
El Instituto de Oftamobiología Aplicada (IOBA) desarrolla parte de sus investigaciones en torno al glaucoma estudiando la sensibilidad y especificidad de nuevos campímetros (instrumentos para medir el campo visual), que se utilizan para diagnosticar y realizar un seguimiento de la progresión de la patología. Aunque el proyecto más importante que tienen en torno al glaucoma lo realizan en el marco del CIBER-BBN (Centro de Investigación Biomédica en Red-Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina), concretamente, ha precisado el doctor Ussa, consiste en el desarrollo de una lente de contacto sensora que permitirá medir la presión del ojo de forma no invasiva.