Nutrition Mexico , Yucatán, Monday, July 27 of 2009, 17:05

La UNAM logra el primer cultivo de pulpo en el mundo

La Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación obtiene crías de Octopus maya, única especie endémica de ese cefalópodo en México

UNAM/DICYT Integrantes de la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación de la Facultad de Ciencias, con sede en Sisal (Yucatán) lograron, por primera vez en el mundo, el cultivo del Octopus maya, única especie de pulpo endémica de México. El grupo desarrolló un sistema de producción a escala para alcanzar alrededor de 50 mil crías mensuales en las instalaciones de la UNAM, indicó el investigador a cargo del proyecto, Carlos Rosas Vázquez.

 

El 2010, agregó, podría construirse la primera granja comercial de pulpos, a cargo de la sociedad cooperativa de producción pesquera de mujeres Moluscos del Mayab, que colabora con los científicos. Octopus maya, “pulpo rojo” o de “cuatro ojos”, es una especie costera de importancia comercial por el tamaño que alcanza. Suele pesar entre medio y cuatro kilogramos en su etapa adulta, que la hace apropiada para la explotación pesquera, explicó.

 

Estos cefalópodos viven principalmente en la plataforma costera de la península de Yucatán, que cuenta con un ecosistema propicio para su desarrollo como huecos para refugio y zonas de pastos marinos, donde abundan crustáceos, moluscos, cangrejos, langostas, camarones, caracoles y almejas, de los que se alimentan, señaló. Rosas Vázquez expuso que la especie tiene un ciclo de vida corto, se calcula que viven solamente un año; nacen con un peso aproximado de 100 miligramos, y en 12 meses alcanzan su peso máximo. Al final del periodo de crecimiento, las hembras son fecundadas y depositan sus huevos en una caverna, dejan de comer para cuidar el nido y no lo abandonan hasta que nacen las crías y mueren al poco tiempo.

 

Octopus maya es una especie peculiar, tiene un ciclo de vida “directo”; la hembra pone los huevos de los que se desarrollan los embriones y posteriormente un pulpo similar a un adulto. Otras especies tienen una etapa larvaria después de la embrionaria, lo que se ha convertido en una limitante para su cultivo. “Esta diferencia ha sido fundamental para tener éxito en la producción de Octopus maya”, dijo. Estimaciones basadas en la pesca, consideran que la población de pulpos rojos es de alrededor de 50 millones. Sin embargo, en los últimos años se ha visto una disminución creciente. En el 2007, las capturas en Yucatán rondaron las 12 mil toneladas, mientras que en el 2008 no rebasaron ni las dos mil.

 

Rosas expuso que la producción pesquera de pulpo en México ronda las 18 mil toneladas en un buen año, aunque en promedio son 10 mil con un valor de hasta mil millones de pesos, de acuerdo con el periodo y precios en el mercado internacional. En 2007, fue de 300 millones de pesos. Además, abundó, 80 por ciento del producto capturado en el país se exporta y aunque 15 mil familias mexicanas dependen de esta actividad, en el territorio nacional sólo se consumen dos mil toneladas y el resto se va a Europa y Japón, principalmente.

 

Alternativa para la época de veda

 

El proyecto se inició en 2003 para ofrecer una alternativa a los pescadores en época de veda, porque el pulpo sólo se puede extraer entre el primero de agosto y el 15 de diciembre, periodo establecido por el Instituto Nacional de la Pesca para proteger las etapas reproductivas. Una vez iniciados los estudios en laboratorio, se concretó un acuerdo con la cooperativa de mujeres para que engordaran a las crías; los universitarios evaluarían la tasa de crecimiento, la aclimatación a condiciones de cultivo y el tipo de alimento que pueden consumir. En consecuencia, se desarrollan mil pulpitos en tanques de ocho metros cuadrados. “Podemos decir que somos capaces de lograr pulpos de hasta cinco gramos en dos meses”, aseguró.

 

Después se trasladan a un sistema de engorda en estanques externos, donde alcanzan 30 gramos en otros 60 días. Así, en 120 días están listos para la “cosecha”, abundó. En las instalaciones de la Unidad se cuenta con un área de reproducción que funciona en forma “piloto-comercial”, y se diseñó una incubadora artificial para los huevos, en vías de patente. También se cuenta con un área de pre-engorda con 10 tanques de producción de pulpos de cinco gramos, y nueve tanques para la engorda de pulpos que alcanzarán un peso de 30 gramos. No obstante las facilidades que presenta la especie, el cuello de botella para el cultivo se encontró en la alimentación de las crías, destacó.

 

“Los pulpos tienen un sistema digestivo complicado, más parecido al de un mamífero que al de un animal acuático. Esto ha obligado a realizar estudios finos de bioquímica, dirigidos a establecer con mayor precisión las condiciones en las que digieren alimentos artificiales balanceados que satisfagan su voracidad y eviten el canibalismo”, subrayó.

 

Se ha probado carne de cangrejo, mezclada con desechos de pescado y pulpo con buen resultado, aunque continúan las investigaciones. Con los trabajos a escala de producción piloto comercial se podrán cuantificar costos y desarrollar un paquete tecnológico para ponerlo a disposición de los empresarios e inversionistas que han mostrado interés.

 

Manual de producción

 

El equipo de Rosas Vázquez también desarrolló un manual preliminar de producción de pulpo, además de varios artículos en revistas científicas y un capítulo de libro de próxima publicación, junto con la formación de estudiantes de licenciatura y posgrado. En la investigación colaboran integrantes de las facultades de Química y Medicina, y otras instituciones como la Universidad Autónoma de Baja California; el Centro de Investigaciones Forestales Agropecuarias y Pesqueras de la Junta de Andalucía, España; las universidades de Barcelona, Austral de Chile, y de Paraná, Brasil, entre otras.

 

La UNAM propuso a colegas latinoamericanos y europeos hacer un consorcio denominado UNICEPH (United Initiative for Cephalopods Research). Se trata de un proyecto de colaboración con la comunidad europea para obtener financiamiento y resolver la parte de engorda del pulpo mexicano, y la del cultivo larvario de otras especies.