La nueva campaña de Atapuerca trabajará sobre cinco yacimientos
María Orive/DICYT Alrededor de 60 personas trabajan desde hoy en la primera fase de la campaña de excavación de 2008 en los yacimientos de Atapuerca, que se ampliará a lo largo de julio y que se centrará en cinco puntos de extracción de la sierra burgalesa: la Sima del Elefante, la Covacha de los Zarpazos, la Gran Dolina, la Cueva del Mirador y el Hotel California.
Las excavaciones en los yacimientos de la Sierra de Atapuerca están coordinadas por los tres codirectores del proyecto Atapuerca, José María Bermúdez de Castro, Juan Luis Arsuaga y Eudald Carbonell. El objetivo fundamental del equipo de investigación es avanzar en la Gran Dolina para llegar al nivel TD 6 en el que se encuentran los restos del Homo Antecessor, el antepasado más lejano de un millón de años de antigüedad. Bermúdez de Castro, ha explicado que “para conseguirlo hay que estudiar primero las capas más altas que también tienen numerosa información”. Sin embargo, el codirector reconoce que “a los tres nos gustaría llegar al Nivel 6, donde nos esperan casi seguro una cantidad de restos del Homo Antecessor”.
La Sima del Elefante está ubicada en la Trinchera del Ferrocarril. Durante la campaña de excavación de 2007, el equipo investigador de Atapuerca realizó el descubrimiento de una mandíbula humana asociada a útiles de sílex de tradición Olduvayense (Modo 1) de 1'2 millones de años de antigüedad, que ha dado la vuelta al mundo, a través de la publicación en la revista Nature.
La campaña de este año se centrará también en la Cueva del Mirador en busca de restos de Neandertal, que todavía no han aparecido, y se intensificará en los yacimientos al aire libre, concretamente en el denominado Hotel California, en el que se trabaja desde hace tres años, desde donde se pretende conocer cómo controlaban el territorio nuestros antepasados. Bermúdez de Castro ha explicado que “la idea es conocer cómo se exploraba el territorio, a través de una ciencia que lleva pocos años en funcionamiento”. Ha destacado que “nos interesa conocer cómo se movía, cómo conseguía las materias primas, que cantidad de territorio podían recorrer y controlar alrededor de la Sierra de Atapuerca, es un proyecto a largo plazo”. En Covacha de los Zarpazos, ubicado en la Trinchera del Ferrocarril, se seguirán las labores de excavación en Zarpazos, que forma parte del Complejo de Galería.
En julio se incrementará el número de investigadores hasta rondar las 200 personas y se trabajará, entre otros lugares, en la Sima de los Huesos, uno de los espacios más prolíficos del mundo en restos de Homo Heidelbergensis, de 400.000 años de antigüedad. “Es un yacimiento con muchas dificultades técnicas”, ha afirmado José María Bermúdez de Castro. Además, se seguirá excavando en el Portalón de Cueva Mayor y se realizarán de nuevo las labores de lavado de sedimento en las orillas del río Arlanzón a su paso por Ibeas de Juarros.
Científicos
La mayoría de las personas que excavan en la Sierra de Atapuerca pertenecen a distintos Centro de Investigación del Proyecto Atapuerca, procedentes de las universidades de Burgos, Rovira i Virgilli (Tarragona), Complutense, Alcalá de Henares, Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid, Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh), Centro Mixto UCM-Sobre Evolución y Comportamiento Humano y la Universidad de Zaragoza.
En la Sierra de Atapuerca excavan especialistas en abundantes disciplinas tales como la Arqueología, Biología, Paleontología, Zoología y Palinología, hasta más de 20 disciplinas diferentes, cuyo fin es conocer cómo eran y cómo vivían nuestros antepasado en la Sierra de Atapuerca. Los investigadores de Atapuerca son, en su mayoría doctores y licenciados, y el resto estudiantes. El fin de este reparto es que en cada yacimiento existan abundantes especialistas para poder enseñar de forma más directa a los estudiantes que vienen a colaborar.
La Fundación Atapuerca, por lo que respecta a su labor de apoyo a la investigación y como complemento a la financiación pública por parte de la Junta de Castilla y León y otras administraciones, procede a la dotación de personal, materiales, equipos y servicios, tanto logísticos como técnicos, necesarios para el adecuado desarrollo de las labores de excavación, así como la financiación para la realización de programas de dataciones de restos e investigación de los mismos.