La dispersión de la población regional dificulta la depuración de las aguas
JPA/DICYT La complejidad de Castilla y León en el aspecto geográfico y de distribución de la población hace que la labor de tratamiento de las aguas para evitar la contaminación del medio ambiente presente muchas dificultades. Así lo ha explicado hoy en Salamanca el director general de Infraestructuras Ambientales de la Junta de Castilla y León, José Antonio Ruiz Díaz, que ha participado en la jornada Agua limpia para un mundo sano, que ha servido para celebrar el Día Mundial del Agua. Según los datos que ha presentado, en la región aún faltan por poner en marcha 90 depuradoras.
La comunidad autónoma tiene 2.250 municipios y unos 6.000 núcleos de población, de manera que se multiplican los puntos de contaminación de las aguas que hay que resolver, aunque nadie sebe qué se entiende exactamente por un tratamiento adecuado, según Ruiz Díaz. Aunque las 90 depuradoras que faltan por construir sólo atenderán al 6'5% de la población, la inversión llegará a los 1.000 millones de euros con el objetivo de que todos estos proyectos estén iniciados en 2015. Por el momento, hay 43 en ejecución, 22 con el proyecto redactado y 25 con el proyecto en redacción, ha explicado. Para ello, se le ha dado prioridad a las depuradoras ubicadas en espacios naturales protegidos.
En la mayoría de los casos, las aguas residuales necesitan tratamientos biológicos y eliminación de sustancias como el fósforo, nutriente agrícola. Además, el director general de Infraestructuras Ambientales ha recordado que los principales problemas de calidad de las aguas en la región están en la zona del acuífero de Los Arenales, en la Cuenca del Duero, que se extiende por las provincias de Valladolid, Zamora, Salamanca, Ávila y Segovia, por sobreexplotación y presencia de arsénico.
Por otra parte, Ruiz Díaz ha señalado que es necesario realizar una labor de concienciación sobre el valor del agua. "No somos conscientes de los costes del agua"; ha asegurado, poniendo como ejemplo que en Castilla y León, como media, el metro cúbico cuesta 0'74 euros, mientras que la media española es de 1'5 euros.
La jornada Agua limpia para un mundo sano, que se ha celebrado en el Aula Cultural de Caja Duero, ha contado con la participación de otros expertos y ha estado organizada por el Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico del Agua (CIDTA), de la Universidad de Salamanca.