La Ciuden y sus socios firman con la CE el contrato para desarrollar la captura y almacenamiento de CO2
Antonio Martín/DICYT La Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden) y sus dos socios en el proyecto de desarrollo de tecnologías de captura y almacenamiento de CO2 han firmado con la Comisión Europea el contrato que dotará a este conjunto de investigaciones con 180 millones de euros de subvención pública. Este dinero está destinado a la financiación de la planta de demostración de captura planificada en las proximidades de Ponferrada (León), así como a la experimental de almacenamiento en Hontomín (Burgos) y los proyectos de identificación y caracterización de los potenciales emplazamientos para almacenamiento industrial.
El proyecto de Ciuden y las compañías privadas Endesa y Foster Wheeler, denominado OXY-CFB-300, tiene dos fases. En la primera, comprendida en 2009 y 2012, que es la contratada por la Comisión Europea ahora, la fundación estatal, con sede en Ponferrada, deberá culminar la construcción y comenzar las pruebas de funcionamiento de la planta de desarrollo tecnológico que actualmente levanta en Cubillos del Sil (León). En este periodo, además, esta organización debe desarrollar un programa de investigación aplicada para abordar el proceso de almacenamiento geológico de CO2 con el suficiente conocimiento científico y tecnológico. La planta experimental que la fundación construirá en Hontomín servirá para realizar los ensayos.
En esta fase, la compañía energética Endesa será la coordinadora del proyecto y realizará los estudios técnicos de viabilidad y riesgos y la ingeniería básica de la planta de demostración de captura de CO2 de 300 megavatios eléctricos de potencia. Asimismo, se encargará de la definición y caracterización de los emplazamientos válidos para almacenar este gas de efecto invernadero e ideará la línea de transporte entre la planta de captura y la de almacenamiento. Foster Wheeler, por su parte, se encargará del diseño básico de la caldera de la futura planta y de la validación de la tecnología de captura de oxicombustión en lecho fluido circundante, junto a la Ciuden.
En la segunda fase, entre 2013 y 2015, la Ciuden y Endesa, junto a otros socios, tienen previsto llevar a cabo la construcción de la planta de 300 megavatios eléctricos y el desarrollo y la gestión del almacenamiento industrial que albergará un millón de toneladas de CO2 al año. Esta nueva planta tendrá ya una gran escala industrial. La de desarrollo tecnológico de Cubillos, de carácter previo en este proyecto y que estará construida a finales de 2010, según las previsiones, incorpora una caldera de 30 megavatios térmicos de lecho fluido circundante.
La aportación de la Comisión Europea para la primera fase, de 180 millones de euros, se repartirá en un 51% aproximadamente para la Ciuden, 45% para Endesa y 2'9% para Foster Wheeler. Este entente público-privado destaca la "singularidad" del proyecto dado a que es el único de los seleccionados por la Unión Europea que contempla el desarrollo de tecnología de lecho fluido circundante con almacenamiento de CO2 en acuíferos salinos profundos. Además del denominado Proyecto Compostilla, otros cinco proyectos de captura y almacenamiento de CO2 han sido seleccionados por la Unión Europea.
Desarrollo del proyecto español
La Fundación Ciudad de la Energía se creó en mayo de 2006, como la principal institución del Gobierno de España para desarrollar programas de captura y almacenamiento geológico de CO2. Esta iniciativa persigue reducir las emisiones de dióxido de carbono, el principal gas de efecto invernadero, a la atmósfera. En 2007, la Ciuden comenzó el diseño de la planta de desarrollo tecnológico de oxicombustión. En 2008, se alió con Endesa, que desarrollaba sus propios planes de captura, para hacerlos confluir con los de la fundación pública. A su vez, Endesa y Foster Wheeler habían acordado un año antes evaluar y desarrollar las fases iniciales de una planta de demostración comercial con captura. En 2009, la Ciuden y Endesa, con Foster Wheeler como socio tecnológico, se presentaron al Programa Europeo de Recuperación Económica. La Comisión Europea aprobó definitivamente, el 9 de diciembre de ese año, el proyecto español, junto con otros cinco de Reino Unido, Países Bajos, Italia, Alemania y Polonia. Está previsto que este desarrollo científico y tecnológico permita la renovación de las actuales centrales térmicas de combustibles fósiles a partir de 2020 en España y el conjunto de la Unión Europea y, por lo tanto, la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera.