Investigadores vallisoletanos fomentan el conocimiento sobre las energías renovables a través de un proyecto europeo
YG/DICYT Investigadores del Laboratorio de Energía y Atmósfera del departamento de Física Aplicada de la Universidad de Valladolid han participado durante los últimos tres años en un proyecto europeo denominado Best Result (Building and Energy Systems and Technologies in Renewable Energy Sources Update and Linked Training) cuyo objetivo principal ha sido incrementar el conocimiento sobre las fuentes de energía renovable por parte de constructores, proveedores, usuarios y público en general. Fruto de esta iniciativa, en la que han participado 15 socios de 7 países diferentes (España, Grecia, Italia, Polonia, Portugal, Reino Unido y Rumania) se ha generado numeroso material, actividades y cursos a través de los que se pretende difundir y educar acerca de las energías limpias y sus aplicaciones, especialmente en la edificación.
El proyecto acaba de finalizar y ha estado financiado por la Intelligent Energy Europe, y coordinado por el Centro Regionale di Assistenza per la Cooperazione Artigiana, en Italia. Cada uno de los socios, entre los que también se encuentra la Fundación Cartif, ubicada en el Parque Tecnológico de Boecillo, ha tenido una función concreta dentro del proyecto. Así, en el caso de los investigadores de la Universidad de Valladolid, según ha precisado a DICYT su responsable, Julia Bilbao, se ha elaborado, por ejemplo, “una de las unidades didácticas incluidas en el curso on line sobre energías renovables gratuito que cualquier persona interesada puede realizar a través de la web del proyecto, www.bestresult-iee.com”.
Cada socio se ha encargado de hacer una de estas unidades que, en el caso del Laboratorio vallisoletano, se ha centrado en los sistemas fotovoltaicos para la generación de electricidad y su integración en edificios. La unidad consta de 6 lecciones en las que se aborda el sol y la radiación solar, las células solares, el módulo fotovoltaico, elementos de un sistema fotovoltaico, y su integración en edificios.
Cursos, visitas y publicaciones
Esta ha sido una de las herramientas generadas por el grupo de Julia Bilbao, pero no la única. Así, la investigadora ha precisado que durante estos tres años se han organizado también 3 cursos intensivos (uno por año) en los que principalmente se han abordado dos tipos concretos de fuentes limpias: la energía solar fotovoltaica y térmica, además de la normativa en el campo de las energías renovables y su aplicación en edificios: Código Técnico de la Edificación (CTE).
Estos cursos han ido acompañados de visitas al parque eólico de Dueñas (Palencia), tres instalaciones de energía solar fotovoltaica en Torquemada y Astudillo (Palencia) y la Escuela Universitaria Politécnica (EUP) de Valladolid, además de instalaciones deportivas en la capital que hacen uso de un sistema solar térmico de producción de ACS para piscinas. Finalmente se realizó una visita al edificio del EREN (Ente Regional de la Energía de Castilla y León) en León.
Junto con estas actividades, el grupo perteneciente a la Universidad de Valladolid ha elaborado otras tres publicaciones técnicas sobre el uso de estas energías en edificación y organizado actividades demostrativas del funcionamiento de algunas fuentes de energía renovables durante la Semana de la Ciencia y la pasada feria Expobioenergía, celebrada en Valladolid.
En palabras de la investigadora, “ha sido la biomasa el tipo de energía que ha generado un mayor volumen de información a lo largo de este proyecto”, en el que además se ha puesto de manifiesto que “a nivel tecnológico, la energía solar fotovoltaica se está desarrollando mucho, aunque todas ellas están muy vivas”.