Salud Chile , Metropolitana de Santiago, Lunes, 30 de noviembre de 2009 a las 18:36

Investigadores chilenos coordinan un trabajo sobre la química de fármacos para la enfermedad de Chagas

Los científicos han dado con una nueva estructura que puede tener éxito ante el agente patógeno

AMR/OEI-AECID/DICYT Cuatro grupos de investigadores de diferentes instituciones chilenas, junto con dos grupos de Uruguay y España han desarrollado un estudio químico que puede facilitar el desarrollo de nuevos fármacos para afrontar la enfermedad de Chagas, una patología parasitaria tropical que se considera endémica de América. El estudio multidisciplinar contempla personal de tres departamentos de la Universidad de Chile y de uno de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, también chilena, además de personal de la Universidad de la República, de Uruguay, y del Instituto de Química Médica, del CSIC español.

 

La enfermedad de Chagas (tripanosomiasis americana) es una enfermedad parasitaria potencialmente mortal que se ha generalizado en América Latina a afectar a entre 10 y 14 millones. Esta enfermedad es causada por el flagelo denominado Trypanosoma cruzi. La enfermedad de Chagas es motivo de preocupación epidemiológica no sólo en América Latina, sino también, potencialmente, en los Estados Unidos, Canadá, España, Italia, Israel y Australia, por la alta tasa de inmigración de población latinoamericana. De hecho, el desarrollo de nuevos compuestos es una clara necesidad para el tratamiento de la enfermedad de Chagas crónica.

 

Aunque, ha proporcionado cierto éxito cuando se usa en los casos agudos, la actual terapia estándar de benznidazol (ofrecida por varias casas comerciales) es, según los investigadores, sólo "mínimamente eficaz" y se asocia con efectos secundarios significativos. Estos compuestos han mostrado una actividad significativa en la fase aguda, con un máximo de cura parasitológica del 80% en los pacientes tratados. Sin embargo, en la fase crónica, menos del 20% de los pacientes tratados  logró la cura parasitológica.

 

El mecanismo de este fármaco consiste en que sus compuestos funcionan como profármacos y deben someterse a la enzima en la activación mediada por el agente patógeno para tener efectos citotóxicos, al existir reacciones que son catalizadas por nitrorreductasas. Los investigadoresm sin embargo, ahondaron en otra vía. A  pesar de su toxicidad, los compuestos nitroaromáticos son generalmente muy potente contra Trypanosoma cruzi. Recientemente, este grupo de científicos han descrito la síntesis de una serie de derivados de nitroindazol y también su actividad antiparasitaria contra la bacteria. Sin embargo, algunos de estos 5-NI, como se denominan técnicamente, no mostró citotoxicidad inespecífica significativa contra los macrófagos. Además, los expertos demostraron la eficacia de algunos nitroindazoles en un modelo agudo in vivo de la enfermedad de Chagas.

 

De conformidad con estos trabajos previos y teniendo en cuenta tanto la importancia biológica del grupo nitro y del anillo indazol, los especialistas idearon una nueva serie de 5-NI. Las modificaciones estructurales realizadas junto con su efecto sobre la lucha contra la Trypanosoma cruzi, además de otros estudios paralelos, han permitido extraer algunos de los requisitos estructurales para crear un tripanocida adecuado en el diseño de futuros fármacos. "Los resultados proporcionan apoyo para estimular aún más en los estudios in vivo de los nuevos compuestos en modelos animales adecuados para superar la enfermedad de Chagas", explican los especialistas en Bioorganic & Medicinal Chemistry.