Empresa ganadera emplea sus desechos para abastecerse de energía
Agencia ID / DiCYT En los últimos años, los proyectos de energías alternativas están creciendo rápidamente, no sólo por las soluciones ambientales que implican al aumentar la producción sin deteriorar el ecosistema, sino también desde el punto de vista económico. Es por ello que un grupo agropecuario de León, Guanajuato, se preocupó en la generación de fuentes alternas que abastecieran su consumo energético.
Se trata de la compañía Granja La Estrella, que emplea desde 2005 el estiércol generado a diario por el ganado para producir energía. A través de la obtención de gas metano (CH4) a partir de heces de animales para utilizarlas en generadores de combustión interna; es decir, hacer funcionar la granja sin recurrir a la energía convencional, comentó el ingeniero en zootecnia, José de Jesús Rangel Delgado, representante de esa empresa.
El especialista explicó que primero se colocó el estiércol en un estado anaeróbico, el cual consiste en “descomponer material orgánico en ausencia de oxígeno para obtener diversos gases como dióxido de carbono (CO2) y metano (CH4), ello bajo ciertas condiciones de pH (acidez), presión y temperatura a fin de que los desechos sean útiles al proceso.
Rangel Delgado indicó que el biodigestor de desechos orgánicos, donde se lleva acabo el proceso, es un contenedor cerrado, hermético e impermeable, fabricado sobre la tierra, en el cual depositan las heces del ganado. Además cuenta con un dispositivo de salida para líquido y otro capaz de captar y almacenar el biogás.
Este sistema mantiene almacenado el estiércol por al menos 45 días después de agregar el agua residual de la granja, con el propósito de crear una mezcla con aproximadamente el 16 por ciento de sólidos suspendidos. “Ese tiempo es suficiente para originar una actividad microbiana en la que intervienen cepas de bacterias encargadas de la digestión de la materia orgánica y producir gas metano (CH4), así como fertilizantes ricos en nitrógeno, fosforo y potasio”, expuso el ingeniero Rangel Delgado.
Asimismo, dijo que para óptimos resultados, el biodigestor se forra con un material de Polietileno de Alta Densidad (geomembrana), el cual funciona como estabilizador de calor, pues la temperatura constituye una base fundamental en la generación de gas.
Por tanto, el representante de Granja La Estrella recomienda una temperatura de alrededor de 19 a 40 grados centígrados, menos calor reduciría la cantidad de gas metano.
Dicha compañía cuenta con alrededor de 700 cabezas de ganado que generan 25 toneladas diarias de estiércol, cuyos desechos orgánicos producen mil 400 metros cúbicos de biogás, con 62 por ciento de metano (CH4) y 23 por ciento de dióxido de carbono (CO2).
El también especialista en ganado bovino indicó que el combustible obtenido se integra a un mecanismo generador de electricidad que abastece las diferentes zonas de esa granja como pozos, establo e incluso las bombas del mismo sistema. Sin embargo, sólo ocupa 32 por ciento de energía y deshecha el sobrante. Ello representa un ahorro de energía por más de 100 mil pesos mensuales en producción, mantenimiento y operación.
Rangel Delgado mencionó que para esta firma, la actividad agropecuaria es de fundamental importancia no sólo por ser un sector que ha crecido en los últimos nueve años, sino también al conseguir solventar la problemática energética-ambiental al realizar un adecuado manejo de los residuos animales.
Como resultado de este proceso también generó residuos con un alto grado de concentración de nutrientes y materia orgánica ideales para regenerar suelos, debido a que el tratamiento anaeróbico convierte los desechos en minerales y se espera, en un proyecto con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), Unidad Irapuato, utilizar el líquido final del biodigestor para elaborar y comercializar un fertilizante líquido.
Es de destacar que esta investigación se encuentra bajo los estándares del Protocolo de Kyoto sobre el cambio climático, acuerdo establecido con el objetivo de reducir gases causantes del calentamiento global. Además, este sistema a partir de sus operaciones a noviembre de 2010 ha dejado de emitir a la atmósfera 16 millones 566 mil metros cúbicos de gases con efecto invernadero y tan sólo de 2006 a 2008 generó 7 mil 732 certificados de carbono.
“El biodigestor es un sistema sencillo de implementar, por lo que Granja La Estrella ofrece asesorías para aquellas empresas preocupadas en mitigar la generación de gases de efecto invernadero, así como realizar un adecuado manejo de los residuos orgánicos de los animales”, concluyó el ingeniero Rangel Delgado.
Cabe mencionar que el desarrollo del biodigestor es resultado de la participación de un equipo multidisciplinario de la empresa, el Centro de Investigaciones y Estudio Avanzados Unidad Irapuato (Cinvestav) y la Universidad de Guanajuato. Asimismo, contó con el financiamiento de Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en 2006 y del Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Guanajuato.