El Ente Regional de la Energía lidera un proyecto europeo de desarrollo a nivel regional de la bioenergía

AMR/DICYT La bioenergía es clave para el cambio de modelo energético en que parece involucrada la Unión Europea. Las instituciones comunitarias pretenden que el uso de combustibles de origen biológico, en contraposición a los fósiles (petróleo, carbón) que mayoritariamente se emplean hasta ahora, se extienda a las Administraciones de corte regional y local que existen en el ámbito continental. Un proyecto liderado por el Ente Regional de la Energía (EREN) de Castilla y León tratará de mejorar estas políticas regionales sobre bioenergía. Este organismo autonómico cooridnará el trabajo de otras seis entidades públicas europeas.

Los socios del proyecto tendrán que completar en los próximos tres años y medio la redacción e implementación de planes regionales de energía. Castilla y León y la región sudeste de Irlanda ya tienen adelantado el trabajo, por lo que se encargarán de transferir el conocimiento generado en sus lugares de origen. El resto (Macedonia Oeste, de Grecia; provincia de Trento, Italia; región autonómica de Kosice, Eslovaquia; sudeste de Suecia y Tartu, Estonia) deberán realizar sus propios textos reguladores. Los siete integrantes del proyecto además intercambiarán experiencias, prácticas, metodología y tecnologías.

En un nivel inferior, el proyecto, que se denomina Bio en Área, establece diferentes subproyectos, más específicos. Consistirán en acciones pioneras de aspectos concretos de bioenergía. Cada uno será realizado por un consorcio de al menos tres entidades de países distintos. Como en el caso del proyecto madre, los subproyectos tienen el objetivo de identificar, transferir y diseminar las buenas prácticas y tecnologías de las regiones europeas más avanzadas a otras. El proyecto está financiado con 3.160.000 euros, dentro de la convocatoria Interreg IV-C de cooperación interregional.