Medio Ambiente México , Baja California Sur, Miércoles, 04 de mayo de 2022 a las 14:13
COLUMNA | SOMOS MAMÍFEROS

El cuerpo también tiene su gasoducto

Es difícil pensar que los vertebrados tienen un gasoducto por donde se conducen los gases esenciales a través del cuerpo para poder mantener la vida. La ausencia o exceso de uno de ellos puede ser el punto de inflexión entre la vida o la muerte

Alina Gabriela Monroy-Gamboa y Sergio Ticul Álvarez-Castañeda/CIBNOR/DICYT La vida de los vertebrados depende de que el gasoducto del cuerpo trabaje de manera adecuada y eficiente. Siempre hemos concebido que un gasoducto es unidireccional, del punto A al punto B. El gasoducto de los vertebrados es bidireccional, transportando proporciones diferenciales de dos gases en función de la dirección en la que se dirija. El cambio de la dirección del flujo puede variar dependiendo de las especies bajo condiciones basales (sin agitación). En el caso de los mamíferos marinos el intercambio se realiza en promedio una vez después de algunas decenas de minutos, en contraparte en las musarañas sucede al menos dos veces por segundo; en el caso del humano adulto el ciclo completo de flujo bidireccional se produce de 16 a 20 veces por minuto.


El gasoducto tiene la capacidad de transportar aire con oxígeno hacia el interior y aire con dióxido de carbono hacia el exterior. El gasoducto tiene dos puntos de inicio, uno de uso normal como son las narinas de la nariz. El segundo, la boca, es una entrada opcional en caso de algún percance con la entrada principal o que la demanda de flujo de gases supere la capacidad física de la nariz. Las dos opciones de ingreso se unen en una estructura que regula el paso del aire, la faringe.


La faringe es una estructura que se puede considerar como el cruce de dos caminos donde el sistema respiratorio y el sistema digestivo se juntan. El aire puede ir hacia el sistema digestivo sin problemas, incluso podría ser útil, pero si llegara a entrar el contenido del sistema digestivo en el respiratorio, las consecuencias pueden ser fatales. La faringe se compone principalmente por tres secciones: rinofaringe (nasal) ubicada detrás de la nariz y se comunica con las trompas de Eustaquio (oído medio). La orofaringe (oral) está ubicada atrás de la boca y es donde se encuentran las tonsilas o amígdalas. La tercera es la laringofaringe (laríngea) conectada con el esófago y laringe. La orofaringe se compone principalmente por tejido muscular y membrana mucosa. Su principal función es servir como medio de transporte a los alimentos, aire y también como caja de resonancia cuando los organismos emiten comunicación auditiva.


El gasoducto continúa en la laringe, en la parte anterior del cuello, entre faringe y tráquea. La laringe está constituida por anillos de cartílagos que limitan su colapso o expansión con el cambio en la presión relativa de los gases. El cartílago principal es el tiroideo, en los humanos comúnmente conocido como manzana de Adán y las hormonas masculinas estimulan su crecimiento, por lo que es más prominente en hombres que en mujeres.

 

Otros cartílagos importantes son el cricoideo, es de forma anular y brinda soporte a las estructuras (músculos, cartílagos y ligamentos laríngeos) que contribuyen a la emisión de sonido. La epiglotis permite aislar el sistema respiratorio del digestivo cuando el alimento se desplaza hacia el estómago para no ahogarnos cuando comemos, es decir, funciona como una tapa para evitar que los alimentos pasen a la tráquea. Pero la función más importante y vital de la epiglotis es que nos permite comer y respirar al mismo tiempo, acción que nos parece lógica porque es cotidiana para nosotros, pero muchas especies no pueden hacer las dos actividades simultáneamente. En la laringe también se ubican las mal llamadas cuerdas vocales, porque de cuerdas no tienen nada. Su nombre correcto es pliegues vocales, originan una serie de vibraciones capaces de producir sonidos que de manera estructurada pueden ser considerados como vocalizaciones.


La tráquea es el conducto que permite el transporte de los gases por el tórax, antes de llegar a los pulmones posee dos ramificaciones llamadas bronquios. La tráquea está compuesta por cartílagos en forma de herradura, tejido muscular liso y conjuntivo elástico. El conjunto de estos elementos le proporciona la flexibilidad necesaria para poder mover cabeza y cuello. El interior está recubierto por epitelio mucoso ciliado que atrapa partículas extrañas como la última barrera para impedir el ingreso de material macroscópico a los pulmones. Si llegaran a acumularse muchas partículas, éstas serían expulsadas por medio de la tos, hay enfermedades que incrementan la mucosidad de la tráquea lo que también dispara la acción de toser.


La longitud y ancho de la tráquea puede variar entre especies, por ejemplo, en las ballenas es más corta y proporcionalmente de mayor diámetro, lo que permite un intercambio rápido de gran volumen de aire, en contraparte, en las jirafas es extremadamente larga. Otras diferencias son los anillos de cartílago, en las nutrias están parcialmente calcificados y en focas, son anillos completos, lo que les ayuda a que la tráquea no se colapse ante la presión recibida de varias atmósferas cuando están buceando.


Las dos divisiones de la tráquea son los dos bronquios y están constituidos de manera similar a la tráquea, pero con menor cantidad de cartílago. Los bronquios son la entrada a los pulmones. Dentro de los pulmones se ramifican progresivamente en bronquiolos hasta formar bronquiolos terminales. Las divisiones más pequeñas son los conductos alveolares y finalmente en alvéolos. A medida que se reduce el diámetro de los conductos la cantidad de cartílago va disminuyendo, mientras aumenta la proporción de músculo liso. Su función también es conducir el aire, en este caso hasta los pulmones.


El gran gasoducto, no solamente transporta el gas, sino también participa en su utilización para la producción de sonido, tener una puerta opcional de ingreso y egreso y la limpieza final del aire.

 

 

Autores
Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, S. C. Instituto Politécnico Nacional 195, CP. 23205, La Paz, Baja California Sur, México. Email beu_ribetzin@hotmail.com (AGM-G), sticul@cibnor.mx (STA-C).