El Complejo Asistencial de León acogerá en marzo un curso sobre paradas cardiorrespiratorias en niños
AMR/DICYT El salón de actos Princesa Sofía del Complejo Asistencial de León acogerá entre los días 3 a 6 de marzo el Curso de RCP Básica y Avanzada Pediátrica y Neonatal, organizado por la Escuela de Urgencias y Emergencias de Castilla y León. El curso, dirigido a médicos residentes de pediatría de Asturias, Cantabria y Castilla y León de cuarto año, a residentes de otros años y a adjuntos de pediatría en general, tiene como objetivo dotar a estos profesionales de medios para la prevención y respuesta de las paradas cardiorrespiratorias en esta población.
En concreto, el objetivo general es la adquisición de conocimientos básicos sobre las causas y medidas preventivas en la parada cardiorrespiratoria (PCR) del niño, el conocimiento de las maniobras fundamentales a realizar en una situación de PCR en el niño, y el aprendizaje de habilidades prácticas para identificar una PCR y realizar una reanimación cardiopulmonar (RCP) básica y avanzada en lactante y niño mayor, según consta en el folleto de inscripción.
El programa comprende clases teóricas comunes para todos los alumnos, adaptadas a las recomendaciones de Reanimación Cardiopulmonar Pediátrica del Consejo Europeo de Resucitación, en el Complejo Asistencial de León. Allí se utilizarán presentaciones elaboradas por el Grupo Español de RCP Pediátrica y Neonatal y se entregará el manual de RCP pediátrica y neonatal del grupo español de RCP pediátrica y neonatal a los asistentes; y clases prácticas sobre maniquíes y muestras biológicas, monitores, simuladores de arritmias y desfibrilador.
Incidencia en menores
Todo niño con enfermedad grave tiene el riesgo real de sufrir una parada cardiorrespiratoria. Los factores más importantes en el campo pediátrico son, entre los respiratorios, la hipoxia y la acidosis respiratoria; entre los hemodinámicos, el estado de choque, la insuficiencia cardiaca, y el síndrome de bajo gasto mantenido, y entre los metabólicos, la acidosis severa y las alteraciones electrolíticas.
La parada cardiorrespiratoria pediátrica presenta unas características diferenciadas respecto a la de los adultos. Hay algunas circunstacias muy significativas. Así, debido a que la tráquea de los lactantes y de los niños pequeños tiene menor consistencia cartilaginosa que la del adolescente o del adulto, se puede provocar un colapso a la hora de la intubación. Por el contrario, la ventilación directa se hace mejor en un menor aplicando la boca del resucitador sobre la boca y la nariz del lactante o niño pequeño simultáneamente mediante insuflaciones pequeñas. Ésta práctica sería contraproducente en adultos.