Nutrition Spain León, León, Monday, May 26 of 2008, 13:42

Científicos del CSIC de León participan en el desarrollo de modelos informáticos sobre enfermedades parasitarias en vacas

El estudio, realizado en Galicia, trata de obtener herramientas para mejorar el control de la fasciolosis y paranfistomosis

IGC/DICYT Fasciolosis y paranfistomosis son enfermedades causadas por parásitos trematodos  (gusanos) de ciclo de vida indirecto, que requieren hospedadores intermedios antes de infectar a los hospedadores definitivos, principalmente rumiantes. La aplicación de medidas de control exige conocer las relaciones entre el parásito el hospedador definitivo, el hospedador intermediario y el medio ambiente. En este campo, investigadores de la Estación Agrícola Experimental (CSIC) de León participan en el desarrollo de un modelo informático capaz de establecer los factores de riesgo de estas enfermedades, para afinar en las acciones de prevención y evitar tratamientos ineficaces.

 

Fasciola hepatica es el parásito responsable de la fasciolosis. Los ejemplares adultos viven en el hígado y conductos biliares de numerosas especies de mamíferos (principalmente rumiantes), incluido el hombre. Varias especies de la familia Paramphistomidae son las causantes de la paranfistomosis de los rumiantes. Los adultos de estos parásitos viven en el rumen, redecilla, duodeno e ileon de los rumiantes. Los ciclos biológicos de los trematodos responsables de ambas enfermedades son similares. Los parásitos adultos que viven en los hospedadores definitivos ponen huevos que salen al exterior con las heces de los animales.

 

En lugares húmedos con temperaturas adecuadas, los huevos evolucionan hasta eclosionar y dejar libre una larva (miracidio), que se introduce en moluscos (caracoles) de agua dulce, que actúan como hospedador intermediario. En su interior el parásito se multiplica hasta transformarse en cercarias que, cuando abandonan el caracol, nadan, pierden la cola y se convierten en metacercarias que se enquistan en plantas cercanas, desde donde pasan al hospedador definitivo (rumiante). Esta metacercaria es la forma infectante del parásito.

 

Modelo matemático

 

Dada la importancia económica y la prevalencia de ambas parasitosis (fasciolosis y paranfistomosis) en el ganado bovino de Galicia, el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) financia un proyecto en el que participan el Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (A Coruña), la Universidad de Santiago de Compostela y la Estación Agrícola Experimental (CSIC, León). El objetivo es "investigar cómo se transmiten Fasciola y Paramphistomum en Galicia, tanto en el hospedador intermediario como en el definitivo, y estudiar cómo influyen las características ambientales para hacer un modelo matemático", explica Yolanda Manga González, responsable del grupo de investigación del centro leonés que participa en el proyecto, especalizado en Parasitología.

 

Para la realización de este estudio se seleccionaron varias zonas de la comunidad autónoma gallega en las que la incidencia de estas parasitosis era elevada. En las explotaciones así elegidas se están realizando muestreos mensuales, que se prolongaran durante dos años consecutivos, para conocer los diversos aspectos que influyen en la transmisión de Fasciola y Paramphistomum. Los científicos de la Universidad de Santiago estudian los procesos relacionados con la biología y ecología de los moluscos, mientras que los de León y A Coruña estudian la dinámica de la infección por los parásitos, tanto en los moluscos hospedadores intermediarios (para saber cuándo se emiten las cercarias y se forman las metacercarias), como en el ganado vacuno y animales silvestres como jabalíes.

 

Ajustar los tratamientos

 

"Sabiendo cómo influyen las condiciones meteorológicas en los parásitos y en los hospedadores definitivos e intermediarios", argumenta Yolanda Manga, "se podrá simular y predecir qué puede pasar en cuanto a las infecciones de fasciolosis y paranfistomosis". El desarrollo de un modelo matemático que reúna toda esta información "permitirá saber cuál es el momento adecuado para tratar a los animales", justifica la investigadora, en cuya opinión, al desconocer en la actualidad las fases de infección de la enfermedad, "quizá estemos tratando de forma indiscriminada (a los animales) y creando resistencias de los parásitos a los fármacos".