Alimentación México , México, Martes, 15 de octubre de 2013 a las 15:25

Buscan nuevas especies marinas para su explotaci贸n comercial

La merluza, langostilla y el bacalao negro pueden ser alternativas para pescadores de la pen铆nsula de Baja California

AGENCIA ID/DICYT En el noroeste de México la mayor parte de la producción pesquera se basa en unos pocos recursos como la sardina, el calamar, el atún y el camarón. Sin embargo, el Centro de Investigaciones Biológicas del Noreste (Cibnor) identificó nuevas especies marinas capaces de incrementar el volumen de esta producción.


Para ello se realizaron viajes de exploración en profundidades y áreas del mar hasta ahora inexploradas en la costa occidental de la Península de Baja California y Golfo de Tehuantepec, explicó el doctor César Augusto Salinas Zavala, titular del proyecto.


Las embarcaciones partieron del puerto de Ensenada con equipamiento para realizar arrastres de fondo, pesca con trampas para peces y crustáceos, así como estimaciones de microorganismos marinos.


Dentro de los hallazgos obtenidos por los investigadores se encontraron dos especies dominantes, como la merluza (Merluccius productus) y la langostilla (Pleuroncodes planipes) que en conjunto suman el 90 por ciento de la captura total, mientras que el resto lo compone el bacalao negro con el 10 por ciento de los especies encontradas.


El especialista en ecología pesquera destacó que la costa occidental de la península de Baja California cuenta con el último reducto a nivel nacional de biomasa disponible para ser objeto de una extracción en forma sustentable. En el caso de la merluza, los investigadores registraron ocho capturas positivas de un total de 26, la principal área donde se encontró fue el Golfo de Ulloa, al norte de Bahía Magdalena. La biomasa total aproximada en dicha zona se estima en alrededor de unas 150 mil toneladas.


En cuanto a su potencial económico, este pez tiene un gran valor comercial en España, donde se reconoce como principal mercado de este producto ya que su adquisición está muy por encima de la media del resto del mundo.


Por su parte para la langostilla se registraron 10 capturas de un total de 14, la principal área donde se halló fue el golfo de Ulloa. La potencialidad que tiene este recurso ya había sido reportada con anterioridad pero no a las profundidades mayores de 150 metros de profundidad como se exploró en este proyecto El aprovechamiento de este crustáceo puede ser para consumo directo o como proveedor de proteína hidrolizada, así como insumo en la fabricación de harina para la elaboración de alimentos balanceados.


Salinas Zavala añadió que dentro de los resultados del proyecto se pretende impactar al sector pesquero, ofreciendo certidumbre en la comercialización, industrialización y en su caso en la generación de nuevas fuentes de empleo si las pesquerías se amplían hacia nuevas aéreas de pesca como la costa occidental de la península de Baja California y el Golfo de Tehuantepec