Brasil formará parte del Observatorio Europeo Austral
Eva Aguilar/DICYT Sergio Machado Rezende, ministro de Ciencia y Tecnología de Brasil, y Tim de Zeeuw, director general del Observatorio Europeo Austral (ESO, por sus siglas en inglés), firmaron el pasado 29 de diciembre un convenio que pone al país suramericano en camino de convertirse en el miembro número 15 de la organización astronómica intergubernamental europea. La firma del convenio se llevó a cabo en la ciudad de Brasilia, y se espera que el parlamento brasileño lo ratifique en la primera mitad del 2011.
Gracias al nuevo convenio, los astrónomos brasileños podrán trabajar en el Very Large Telescope, ubicado en Cerro Paranal, Desierto de Atacama, y en el ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), todavía en fase construcción. Por otra parte, la industria brasileña tendrá la oportunidad de participar en la construcción de una nueva generación de telescopios gigantes, proyectos que involucran el desarrollo tecnológico más reciente.
"La membresía de Brasil le dará a la comunidad astronómica brasileña acceso total al observatorio más productivo del mundo y a la industria brasileña de alta tecnología la oportunidad de contribuir con el proyecto del European Extremely Large Telescope", señaló de Zeeuw, citado en un comunicado de prensa del ESO.
De acuerdo con el convenio, como estado miembro Brasil participará en la construcción del European Extremely Large Telescope (E-ELT), el proyecto más ambicioso del ESO y cuya fase de diseño concluyó recientemente. El E-ELT empezará a construirse este año en Cerro Armazones (Chile) y se espera que empiece a operar a principios de la próxima década.
"Formar parte del ESO le dará un nuevo ímpetu al desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación en Brasil, como parte de los esfuerzos que hace el gobierno para impulsar el avance del país en estas áreas estratégicas", dijo Rezende.
El único miembro fuera de Europa
Los orígenes del Observatorio Europeo Austral se remontan a 1962. En 1963 la organización eligió a Chile como el mejor lugar para construir sus observatorios y actualmente opera tres sitios de observación en ese país: La Silla, Paranal y Chajnantor.
Las negociaciones para que Brasil formara parte del ESO empezaron de manera informal en el 2009. Para mayo de 2010 la comunidad de astrónomos brasileña decidió que la aplicación para formar parte de la organización debía hacerse de manera oficial. La invitación formal por parte del ESO para hacer de Brasil un miembro más llegó en octubre de ese mismo año y el pasado 21 de diciembre, durante una sesión extraordinaria y de manera unánime, el Consejo del ESO tomó la decisión de firmar el acuerdo.
De acuerdo con información suministrada por la organización europea, el acercamiento con Brasil surgió como resultado de la estrecha colaboración que mantiene el ESO con su país vecino, Chile, y gracias a los progresos que el país suramericano ha hecho en materia científica y tecnológica.
"ESO ha sido testigo del rápido desarrollo de la comunidad astronómica brasileña y de los esfuerzos realizados en beneficio del avance de la ciencia y la tecnología en el país. Esperamos que los científicos brasileños hagan pleno uso de las facilidades de ESO, lo cual les permitirá avanzar en el entendimiento del Universo y colaborar con sus colegas europeos. Estamos convencidos de que [los investigadores brasileños] aportarán a la organización nuevos recursos y habilidades", señala el ESO en su página de internet.
Como cuota de membresía, Brasil deberá pagar 130 millones de euros en los próximos diez años.
Después de la ratificación del convenio por parte del gobierno brasileño, Brasil se convertirá en el primer país fuera de Europa en ser miembro de la organización astronómica. Sus miembros actuales son Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Holanda, Italia, Portugal, el Reino Unido, República Checa, Suecia y Suiza.