Salud España , Valladolid, Martes, 13 de abril de 2004 a las 18:15

Sanidad generaliza la detección precoz de la sordera congénita en niños

La consejería ha puesto en marcha un programa que detectará los casos en el primer mes de vida del bebé

BGA/DICYT Según las estimaciones realizadas por la Consejería de Sanidad, la media de casos de hipoacusia, o sordera congénita infantil en Castilla y León está en 53 por cada 1.000 recién nacidos, lo que supone un elevado número de niños, si se tiene en cuenta que el año pasado nacieron en la comunidad un total de 17.698 bebés.

El programa de detección precoz y atención integral de la hipoacusia infantil pretende no sólo la detección precoz, sino también el seguimiento y análisis de resultados de las pruebas realizadas.

Para ello, se generalizará la prueba de detección a todos los niños recién nacidos en su primer mes de vida. Esta prueba consiste en la emisión de unos sonidos en una pequeña sonda o auricular que se coloca al bebé, mientras este duerme, de modo que se puedan detectar, a través de unos sensores, la respuesta que realiza a estos sonidos. El modo de detectar la hipoacusia es fácil, a través de la prueba, cuya denominación técnica es Potenciales evocados auditivos de tronco cerebral automáticos, y se puede realizar a partir de las seis horas de vida, teniendo una respuesta rápida sobre si el bebé capta el sonido o no lo capta.

La prueba se realiza dos veces para cerciorarse de que el bebé no tiene la enfermedad. En caso de detectarse algún tipo de hipoacusia, que puede ser grave o no, se puede realizar un diagnóstico precoz que ayude a su tratamiento.

Audioprótesis y cirugía

Los tratamientos para la hipoacusia infantil son variados en función de la gravedad de la enfermedad. En los casos más graves, existe la posibilidad de colocar un audioprótesis al niño, de modo que se ayude a su comunicación, pero también existen otras posibilidades que pasan por la cirugía. En este sentido, desde el año 2002, se vienen realizando en dos hospitales de la comunidad, el Río Hortega de Valladolid y el Hospital Clínico de Salamanca, implantes cocleares, que son una de las cirugías más avanzadas. El año pasado se realizaron en 41 de estas intervenciones en reción nacidos entre ambos hospitales.

Según indica Guillermo Doménech, jefe del Servicio de Promoción de la Salud de la Consejería de Sanidad, la detección precoz de la hipoacusia es especialmente importante, puesto que la sordera tiene un papel muy relevante en el desarrollo del niño y su interacción con el medio, así como en la maduración del lenguaje.

Asimismo, Doménech indica que existen diferentes tipos de hipoacusia y que este programa permitirá establecer cuál es el tipo que aparece con más frecuencia en Castilla y León.

En la actualidad, los 14 centros hospitalarios del Sacyl realizan esta prueba a sus recién nacidos, y se ha ofertado la posibilidad de realizarlo también a los bebes nacidos en centros privados. Además, desde la consejería se ha puesto en marcha, de forma paralela, un programa informático que permitirá el seguimiento y centralización de los datos obtenidos con la generalización de la criba de detección de la enfermedad.

 

Impulsos eléctricos
En condiciones normales, la cóclea es un elemento muy pequeño, opaco y con forma espiral que está empotrado en el hueso temporal. A la cóclea llegan las vibraciones emitidas por el sonido. Este órgano está lleno de líquido y recubierto de células con pelos microscópicos, que permiten detectar las vibraciones que el sonido produce en el líquido del oído, de modo que las transforma en impulsos nerviosos, que son interpretados por el cerebro.

Los implantes cocleares suponen la implantación en la zona de la cóclea, en el oído interno, de una prótesis que permite la transformación de los sonidos en impulsos eléctricos, de modo que esos impulsos son transmitidos al tronco cerebral y permiten que el paciente detecte el sonido de un modo muy parecido al que oye una persona sana.