Technology Spain , Burgos, Friday, September 13 of 2013, 17:43

Una empresa burgalesa desarrollará la tecnología de impresión 3D

La iniciativa surge de los licenciados en Electrónica Industrial de la Universidad de Burgos Juan García, David Mayor y Miguel Ángel García

CGP/DICYT Los graduados en Electrónica Industrial y Automática de la Universidad de Burgos Juan García Rodríguez, David Mayor Fernández y Miguel Ángel García Abad, han puesto en marcha una empresa de impresoras 3D que se dedicará tanto a la comercialización de estas impresoras como a la realización de prototipos y a la investigación y desarrollo de nuevas tecnologías de impresión 3D. Una impresora 3D es un dispositivo capaz de generar un objeto sólido tridimensional mediante la adicción de material a partir de un diseño realizado por ordenador.


En junio de 2013 Juan García Rodríguez presentó su trabajo de fin de Grado Estado del arte de la Impresión en 3D mediante herramientas libres y su aplicación en el ámbito universitario. En este trabajo se analizó la evolución de esta tecnología en los últimos años y el estado de las técnicas y herramientas disponibles actualmente con licencias libres, tanto de software como de hardware. Como conclusiones del trabajo se plasma la viabilidad de la construcción de modelos de impresoras 3D completamente libres en cuanto a licencias, así como la posibilidad de incluir estas nuevas tecnologías en las enseñanzas del Grado de Ingeniería Electrónica Industrial y Automática de la Universidad.


Una vez finalizado y aprobado el Trabajo, Juan García Rodríguez junto con David Mayor y Miguel Ángel García, compañeros de Electrónica Industrial de la Escuela Politécnica Superior, se plantearon dar el salto de transformar el trabajo académico en un proyecto empresarial basado en las impresoras 3D.


Como explica a DiCYT García Rodríguez, la empresa se dedicará “tanto a la venta de de los modelos de impresoras libres que hay ahora mismo en el mercado como al diseño de impresoras nuevas y a la realización del servicio de impresión 3D en sí”.


En el mes de julio presentaron a la comunidad universitaria el primer modelo de impresora 3D libre construido por ellos mismos y desde entonces, dado el éxito del trabajo, están planificando su empresa, que se encuentra ante su inminente puesta en marcha, prevista para este mismo mes de septiembre tras tener en funcionamiento el tercer modelo de estas impresoras, realizadas por ellos mismos.


“Estamos en pleno proceso de constitución de la empresa y esperamos que esté todo listo este mes para empezar a funcionar ya el mes que viene, aunque llevamos todo el verano contactando con proveedores, empresas y posibles interesados”, señala.


En cuanto al desarrollo de nuevas impresoras, los emprendedores quieren trabajar con la Universidad de Burgos e iniciar “nuevas líneas de investigación”. De este modo, se está dando forma a un grupo de investigación en impresión 3D en el Área de Tecnología Electrónica de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Burgos. El objetivo de este grupo es desarrollar y mejorar la tecnología de impresión 3D, diseñando nuevas soluciones para el control electrónico de estas máquinas, usando esta tecnología como fin y a la vez como herramienta para la formación de nuevos ingenieros.


Qué es una impresora 3D


El término impresión 3D, usado por analogía con la impresión tradicional sobre papel (2D), engloba las técnicas de fabricación aditiva. Esto se debe en buena parte a que la mayoría de los sistemas existentes generan capas paralelas y superpuestas. Los pasos básicos para fabricar un objeto con esta tecnología comienzan por tener el modelo digital del mismo, que se dibuja con cualquier herramienta de diseño asistido por ordenador o mediante un escáner tridimensional. Posteriormente se convierte este modelo digital en un lenguaje estándar que entienda la máquina y se imprime, impresión que puede durar desde minutos a días. De esta manera es posible fabricar piezas muy diversas sin modificar la estructura de la máquina de fabricación, igual que una impresora convencional, que permite imprimir fotos de distintos formatos.


Los posibles usos de esta tecnología abarcan desde el prototipado rápido o las pruebas de concepto y dimensionales de un diseño, hasta maquetas para exhibiciones, arquitectura y obra civil. También resulta útil en ámbitos de investigación, en fabricación de series cortas de productos o piezas de escasa demanda, etc. Una aplicación muy directa es la fabricación de objetos personalizados.


Combinando la electrónica industrial y la fabricación, mediante este método esperan llevar adelante este proyecto de empresa, ofreciendo un servicio de impresión 3D a todo el sector industrial burgalés que quiera obtener una “copia” física de su diseño tridimensional, de forma que lo dibujado en un ordenador pueda convertirse en algo tangible.