El Ibiomed avanza en la identificación de los efectos antitumorales de la melatonina
CGP/DICYT El Instituto de Biomedicina (Ibiomed) de León estudia desde hace varios años las propiedades antitumorales de la melatonina. Esta hormona, producida por la glándula pineal, tiene diversos efectos fisiológicos como la regulación de los ritmos biológicos, y también se ha demostrado que posee una gran capacidad antioxidante y de regulación de la muerte celular programada o apoptosis. Investigaciones desarrolladas en células tumorales de diversa procedencia han puesto de manifiesto que, mientras en células sanas la melatonina inhibe la apoptosis, en las de origen tumoral se produce una estimulación de los procesos apoptóticos que lleva a la muerte de las células.
El grupo de investigación del Ibiomed coordinado por José Luis Mauriz y Javier González Gallego, demostró en trabajos anteriores que la melatonina estimula la apoptosis en células tumorales hepáticas de la línea HepG2, y que este efecto se asocia a un aumento en la expresión de los receptores MT1 y NQO2 (localizados en la membrana celular) y ROR-alpha (del núcleo), así como a una inducción de la proteína proapoptótica Bim a través de la entrada en el núcleo del factor de transcripción FoxO3a.
En un trabajo recién publicado en British Journal of Cancer los investigadores del Ibiomed, en colaboración con la Universidad de Valencia y el Servicio de Oncología del Hospital de León, han analizado la capacidad de la melatonina para inhibir la angiogénesis, “un proceso por el que se forman nuevos vasos sanguíneos para aportar oxígeno y nutrientes a las células tumorales, favoreciendo así el crecimiento tumoral y el desarrollo de metástasis”, explica a DiCYT Javier González Gallego.
En esta investigación se trataron células tumorales hepáticas con melatonina bajo condiciones de normoxia (cantidad normal de oxígeno) o hipoxia (falta de oxígeno) inducida mediante cloruro de cobalto. “La menor disponibilidad de oxígeno dentro del microambiente tumoral contribuye a la progresión del tumor gracias a la liberación del factor HIF1alfa, que induce la expresión de genes como el factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), esencial para la angiogénesis”, resume el investigador.
En las condiciones de hipoxia, “la melatonina redujo la expresión de HIF1alfa, así como su localización nuclear y actividad transcripcional”. Asimismo, “inhibió el reclutamiento del complejo transcripcional formado por HIF1alfa y los factores de transcripción STAT3 y CBP/p300 en el promotor de VEGF”. En este sentido, el efecto antiangiogénico de la melatonina se confirmó mediante el ensayo de formación de tubos en células endoteliales de cordón umbilical humano (HUVEC).
Interés en el tratamiento del hepatocarcinoma
El estudio, que forma parte de la tesis doctoral de la investigadora del Ibiomed Sara Carbajo, se enmarca dentro de las líneas de investigación del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Hepáticas y Digestivas (CIBERehd) del Instituto de Salud Carlos III, una red nacional de investigación en este campo de la cual forma parte el Instituto de Biomedicina leonés.
La línea de investigación desarrollada en el Ibiomed pone de manifiesto que la utilización de la melatonina podría tener interés, al menos como coadyuvante, en el tratamiento del hepatocarcinoma, el tumor hepático de mayor frecuencia y el quinto que más casos registra a nivel mundial. No obstante, Javier González Gallego apunta que “se trata de estudios de carácter básico cuya traslación a la clínica aun requiere de una profundización en las vías de señalización implicadas y de ensayos en animales, antes de poder llegar a humanos”.
Referencia Bibliográfica | |
S. Carbajo-Pescador, R. Ordoñez, M. Benet, R. Jover, A. Garcia-Palomo, J. L. Mauriz, J. Gonzalez-Gallego. "Inhibition of VEGF expression through blockade of Hif1α and STAT3 signaling mediates the anti-angiogenic effect of melatonin in HepG2 liver cancer cells" (2013). British Journal of Cancer doi: 10.1038/bjc.2013.285 |