La Universidad de Salamanca inaugura sus primeras instalaciones de energía solar
JPA/DICYT La Universidad de Salamanca ha inaugurado hoy sus dos primeras instalaciones de energía solar, una térmica ubicada en el Pabellón Polideportivo Miguel de Unamuno y otra fotovoltaica, en el Edificio Departamental. Los responsables de esta iniciativa, que se enmarca en el Proyecto Usalsol, han destacado el carácter simbólico, divulgativo y didáctico de las instalaciones, y han puesto como ejemplo a la Universidad de Valencia, que ha llenado sus tejados de placas fotovoltaicas para vender a la red eléctrica energía que le reporta beneficios por valor de 200.000 euros anuales.
"Es el primer paso dentro del Plan de Gestión Ambiental y Sostenibilidad, pero se puede repetir siempre que se hagan estudios previos y de hecho tenemos varios proyectos de cooperación con el Ente Regional de la Energía, el EREN", ha afirmado la vicerrectora de Planificación Estratégica, Isabel Suárez, en declaraciones recogidas por DiCYT. En este caso, el Proyecto Usalsol se ha llevado a cabo con la colaboración de la Obra Social de Caja Madrid, que ha aportado 70.000 de los 100.000 euros que han costado las instalaciones. El representante de la entidad, Graciliano González, ha asegurado que sus objetivos en materia de medio ambiente se basan en tres pilares: la biodiversidad, el desarrollo sostenible y la educación ambiental.
Precisamente, en este último apartado se inscribe esta iniciativa, ya que por sí misma aportará poca energía, pero servirá para concienciar a la comunidad universitaria y como ejercicio práctico de divulgación. "La Universidad debe ser un ejemplo para la sociedad", ha señalado Miguel Lizana Avia, coordinador del Plan de Gestión Ambiental y Sostenibilidad de la institución académica salmantina, que ha recordado que esta iniciativa conjunta con Caja Madrid ha incluido también la celebración de nueve seminarios en Ávila, Béjar, Zamora y Salamanca y una campaña de buenas prácticas energéticas.
La instalación solar térmica del pabellón aprovechará la energía solar para calentar el agua de unas instalaciones que dan servicio a unas 40.000 personas al año, lo que supondrá un ahorro de un 56% de la energía de este edificio. Los 15 colectores instalados en una superficie de 33 metros cuadrados permiten calentar un depósito de 2.000 litros de agua, de manera que se reducen las emisiones en 5.000 kilogramos de CO2, lo que equivale a dejar de consumir unos 2.000 litros de gasoil y a recorrer 25.000 kilómetros con un vehículo medio.
En el caso de la instalación ubicada en el tejado del Edificio Departamental, al tratarse de paneles fotovoltaicos, permitirán vender a la red eléctrica unos 2.600 kilowatios a la hora, el equivalente al consumo de una familia de cuatro miembros, con un ahorro de emisiones estimado en 1.800 kilogramos de CO2 al año. Se trata de siete captadores solares de módulos de silicio cristalino.
El rector de la Universidad de Salamanca, José Gómez Asencio, que ha visitado las instalaciones, ha valorado el proyecto frente al "consumo energético disparado que tenemos", ha comentado. En este sentido, ha declarado que existen dos soluciones: una es actuar sobre la demanda, para reducir el consumo y mejorar la eficiencia; la otra es "alimentar la promoción de energías limpias", como en este caso.