Los árboles fijadores de nitrógeno son más abundantes en bosques tropicales secundarios, secos y jóvenes
CATIE/DICYT Un amplio estudio, publicado recientemente por la revista 'Nature Ecology and Evolution (NEE)', demostró de manera contundente que los árboles fijadores de nitrógeno, de la familia Leguminosae, son más abundantes en los bosques tropicales secundarios de zonas estacionalmente secas y jóvenes, que en bosques secundarios de zonas húmedas y con mayor tiempo de desarrollo, lo cual se considera un dato trascendental para la restauración de paisajes degradados ya que la fijación de nitrógeno favorece estos procesos.
El estudio es un producto de la red colaborativa de investigación sobre bosques secundarios 2ndFOR, liderado por Maga Gei, Danaë Rozendaal y Jennifer Powers de la Universidad de Minnesota, en Estados Unidos, y la Universidad de Wageningen, en Holanda. Además, tuvo de coautores a reconocidos investigadores como Bryan Finegan, líder del Programa Bosques, Biodiversidad y Cambio Climático del CATIE (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza) y Vanessa Granda, graduada del Centro.
Para su desarrollo el estudió reunió datos de 1207 parcelas de 42 investigaciones sobre bosques secundarios neotropicales.
Según Finegan, el resultado encontrado amplía el potencial de fertilización nitrogenada natural y el secuestro de dióxido de carbono en áreas que se recuperan de la degradación debido a usos de la tierra inadecuados.
“La fijación biológica de nitrógeno es una contribución clave a los ciclos de este nutriente de importancia primordial en la nutrición de las plantas y la productividad de los ecosistemas. Las demás plantas de un ecosistema en proceso de restauración se beneficien del nitrógeno fijado por especies arbóreas cuando las hojas de estas caen al suelo y se descomponen”, explicó Finegan.
Asimismo, Finegan acotó que la restauración de tierras degradadas es un tema de importancia crítica de nuestra época y que la falta de nitrógeno a menudo limita la restauración, por lo que la fijación sin duda facilita los procesos de restauración superando esta limitación.
Otro aspecto a rescatar del estudio es que, de acuerdo con Finegan, sus resultados pueden ayudar a los países en sus esfuerzos por enfrentar el cambio climático, ante la creciente frecuencia e intensidad de las sequías en la vertiente pacífica de América Central y en las islas del Caribe, pues en él detallan muy bien cómo las características de los árboles de esta familia se adaptan a este contexto climático, para crecer y contribuir a la sostenibilidad de los ecosistemas y así secuestrar carbono y aportar a la mitigación.
Referencia bibliográfica | |
Gei, M., Rozendaal, D. M., Poorter, L., Bongers, F., Sprent, J. I., Garner, M. D., ... & Brancalion, P. H. (2018). Legume abundance along successional and rainfall gradients in Neotropical forests. Nature ecology & evolution, 1. |