Salud España , Salamanca, Lunes, 21 de abril de 2008 a las 13:27

El Centro del Cáncer de Salamanca halla cuatro genes implicados en la metástasis de cáncer de pulmón

La investigación, desarrollada junto al Centro de Investigación Médica Aplicada de Pamplona, ha sido publicada en 'Cancer Research'

José Pichel Andrés/DICYT Científicos del Centro de Investigación del Cáncer (CIC) de Salamanca y del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de Pamplona han hallado cuatro nuevos genes humanos implicados en la transformación de células de cáncer de pulmón en células metastásicas, capaces de colonizar y anidar en hueso. Los resultados acaban de ser publicados en la revista científica Cancer Research, de la American Association for Cancer Research.

 

El director del grupo de Genómica Funcional del CIC, Javier de las Rivas, ha explicado a DICYT que la metástasis se produce cuando "una pequeña parte del tumor puede generar células distintas y más agresivas, que tienen la capacidad de salir del tumor primario". El equipo del CIMA, liderado por Fernando Lecanda, tenía aisladas esas células en cáncer de pulmón y ése fue el punto de partida del estudio, ya hace tres años. "Ellos han hecho experimientos con ratones in vivo para demostrar que son capaces de generar metástasis", señala De las Rivas. "Nosotros, con las tecnologías de Genómica funcional y Bioinformática, hemos identificado qué genes de todo el genoma humano están especialmente expresados en esas células. Nuestra tarea fue descubrir genes candidatos, les marcamos estos cuatro y ellos han probado en el laboratorio que efectivamente producen metástasis", resume.

 

Los cuatro genes identificados son: PRKD3, SUSD5, TCF4 y MCAM. Este último ya se había descrito con anterioridad como relacionado con los procesos de expansión tumoral, mientras que los otros tres no se habían involucrado directamente hasta la publicación de esta investigación. "Lo más llamativo de este trabajo ha sido la demostración. Con las técnicas actuales de Biología molecular, a una línea celular le puedes quitar un gen, dos o tres. Habiendo identificado los cuatro, el equipo del CIMA eliminó dos y tres distintos en cada caso y comprobó que las células dejaban de hacer metástasis", apunta el experto. En definitiva, el centro salmantino aportó la tecnología y la identificación de los genes, mientras que los científicos navarros  realizaron la demostración molecular experimental.


Para llegar a realizar ese experimento fue imprescindible contar con la tecnología bioinformática del Centro del Cáncer, que sirvió para identificar los cuatro genes gracias a que permite observar el estado funcional de todos los componentes de este tipo en una célula. "De todo el genoma humano sólo hay un 40% de genes activados, es decir, los que están funcionando, en cada tipo celular. En un solo ensayo de una sola muestra podemos ver todos los genes activados", comenta el experto. En este caso, "teníamos las células metastásicas de distintas líneas celulares y las células tumorales primarias, de manera que por comparación hemos encontrado los genes que eran marcadores diferenciales de las células metastásicas", señala.

 

La gravedad de la metástasis

 

De las Rivas asegura que en la actualidad, lo más grave del cáncer es la metástasis. "Un tumor primario localizado puede ser atacado con fármacos o cirugía, pero cuando se expande es muy complicado de abordar, de manera que hoy en día el 90% de las muertes por cáncer se producen en pacientes con metástasis", indica. En este caso, es muy habitual que en el cáncer de pulmón se produzca metástasis a hueso en cualquier parte del cuerpo, por eso, el especialista del CIC considera que, después de tres años, el artículo de Cancer Research "es el primer logro científico importante que hemos publicado sobre esta investigación".

 

En cualquier caso, el trabajo tiene un enfoque a largo plazo, ya que los dos centros trabajan con otras líneas metastásicas y con otro tipo de tumores. "De la metástasis se sabe muy poco y no todas las líneas son iguales. El CIMA investiga un conjunto importante de ellas y vamos a seguir trabajando para ver si podemos identificar estos mismos genes o aparecen otros", señala De las Rivas, que apunta como referencia las investigaciones del catalán Joan Massagué, experto en metástasis de cáncer de mama, ya que ha publicado muchos "trabajos similares" al que ahora desarrollan los científicos de Pamplona y Salamanca. Por eso, en opinión del director de Genómica Funcional del CIC, "la colaboración entre grupos fuertes que saben hacer cosas complementarias es fundamental".

 

"Un solo gen no lleva al fracaso de una función" 
Una conclusión importante de estos trabajos es que "la Biología no basa sus funciones en un solo gen, sino en grupos de genes que trabajan juntos", asegura De las Rivas. "Cuando quitábamos uno de estos genes, las células, más o menos, seguían siendo metastásicas, y sólo cuando quitábamos dos o tres genes desaparecía la metástasis", indica el oncólogo. "Esto indica que los sistemas vivos son muy robustos, que deje de funcionar un gen no lleva al fracaso de una función, sino que tienen que ser varios, es decir, que la adquisición de la función metastásica no depende de un solo gen", afirma.